Felipe Cortina se casa este sábado (y en septiembre su hermano Carlos): estos son los últimos detalles de las dos bodas del verano

Ya está todo preparado para el enlace este sábado, 10 de julio, de Felipe Cortina y Amelia Millán, el primero de los hermanos Cortina que pasa este verano por el altar (su hermano Carlos se casará en septiembre). Los enlaces de los hijos de Alfonso Cortina y Myriam Lapique son, sin duda, dos de los acontecimientos sociales más importantes de este año (con permiso de Belén Corsini y la casa de Alba), justo cuando la pandemia empieza a dar un respiro. Las dos bodas han sufrido retrasos y cancelaciones debido a la pandemia, pero finalmente parece que el amor y las ganas de irse de boda prevalecerán. Estos son los detalles que sabemos de ambos enlaces.

Felipe, el primogénito de la familia, de treinta y nueve años, había pensado en un principio celebrar su boda en Mallorca, en la vivienda que la familia posee en el municipio de Pollença, pero finalmente hubo cambio de planes y tanto la ceremonia como el banquete y la fiesta posterior se acabarán celebrando este sábado 10 de julio en Villagarcía, la finca con viñedos que la familia posee en Ciudad Real.

La ceremonia religiosa se celebrará en una iglesia del s. XVI del cercano pueblo de Retuerta del Bullaque, pero tanto el aperitivo, como la cena y la fiesta tendrán lugar en la finca familiar, una celebración gastronómica para la que han confiado en el cátering de la prima más mediática del novio, Caritina Goyanes, y el chef Iván Cerdeño.

Es previsible que entre los invitados estén algunos de nuestros invitados vips favoritos como Álvaro Falcó , nuevo marqués de Cubas y prometido con Isabelle Junot, su prima Tamara Falcó con su pareja Íñigo Onieva, Alonso Aznar , el hijo menor del expresidente del Gobierno, Marta Ortega y su marido Carlos Torretta o el DJ Emilio Pan de Soraluce, conocido como Dark Places, que forman parte de círculo de amigos del novio y con quienes se le ve en verano en los chiringuitos más exclusivos de Ibiza o Formentera.

Felipe es el fundador, en 2014, junto a su amigo Álvaro Gómis, de la conocida marca de calcetines Jimmy Lion y contraerá matrimonio con la arquitecta de interiores Amelia Millán, de 34 años y nacida en Bilbao. Amelia es nieta de los condes de Vistaflorida, ya fallecidos. Estudió en la Universidad Poltécnica de Madrid e hizo un máster en Estados Unidos. Acaba de abrir un estudio de decoración en Madrid junto a una socia.

Está previsto que Carlos, dos años menor que Felipe, se case dos meses más tarde en Jerez de la Frontera con la abogada Carla Vega-Penichet Domecq, de 31 años, hija de Jorge Vega-Penichet, directivo de Acciona y de Paloma Domecq, también abogada. Rosario Domecq, esposa de El Juli, es una de sus primas.

La fecha escogida por la pareja es el próxmo 4 de septiembre. De la novia sabemos aque adora la vida familiar y es amante de la caza y del campo. Estudió Derecho y Administración de Empresas en la Universidad Autónoma de Madrid y prosiguió sus estudios en Friburgo y en Shanghai. Trabaja en un fondo de capital del Banco de Santander. Carlos y Carla pasaron parte de su noviazgo en Londres, donde trabajaba él, pero parece que ahora se instalarán en Madrid.

Las bodas de Felipe y Carlos son dos acontecimientos felices que, sin lugar a dudas, llenarán de emoción a Myriam Lapique, hermana de Cari Lapique, tras un año muy triste. Myriam estuvo casada con Alfonso Cortina, ex presidente de Repsol, más de cuarenta años. Cuando falleció por el coronavirus Alfonso Cortina no pudo estar acompañado por su familia por razones de seguridad. Su boda, en Marbella, fue uno de los acontecimientos sociales de aquel año. Sus hijos se han convertido en su mejor apoyo, al igual que su hermana Cari, que ha pasado la pandemia en Marbella, y sus sobrinas Carla y Caritina.

Los dos hermanos Cortina estudiaron en el Liceo Francés y luego en Cunef. Felipe completó su formación en las Universidades de Berkeley y Columbia y en la Universidad de Nueva York. Jimmy Lion, la empresa fundada por Felipe, tiene ahora franquicias por toda España, Europa, México y en Nueva York. El empresario se instaló en Nueva York. Carlos hizo también un MBA en la Universidad de Columbia, aunque, a diferencia de su hermano, volvió a España y entró a trabajar en Endesa, antes de instalarse en Londres para trabajar en un fondo de capital riesgo.

Tras el fallecimiento de su padre, ambos hermanos decidieron dedicarse a la administración de Bodegas Pago de Vallegarcía, el gran proyecto de Alfonso Cortina, fundado en 2006, en el que habían participado, pero desde la distancia. Alfonso Cortina, residía la mayor parte del año en su finca Retuerta de Bullaque, en los montes de Toledo, y allí estaba cuando se declaró el estado de alarma junto a Myriam Lapique.

A los pocos meses de fallecer su padre, Felipe se convirtió en presidente y su madre y su hermano en consejeros solidarios. La empresa tiene un patrimonio de seis millones de euros, aunque ha perdido dinero en los dos últimos años. El firme compromiso de Felipe y Carlos, dos exitosos empresarios, terminará, sin duda, con los números rojos.