apartada del mundanal ruido
Chábeli Iglesias, en una foto de sus redes sociales. /
Es la única de las hijas de Isabel Preysler que decidió apartarse casi completamente del mundanal ruido y se ha ceñido a ese guion. Chábeli Iglesias lleva una vida de lo más plácida en Miami , con sus dos hijos, dedicada al interiorismo, y preparándose para las fiestas navideñas en las que se reencontrará con gran parte de su familia, como suele ocurrir cada año.
Mientras, a este lado del charco, el resto del clan está más presente que nunca en los medios de comunicación ocupando portadas de revista y alfombras rojas, en parte debido al estreno del documental navideño que Isabel Preysler ha protagonizado para Disney + en el que cuenta cómo celebra estas fiestas acompañada por Tamara y Ana Boyer.
La mujer de Fernando Verdasco ha decidido dar el salto a la televisión en Bake-Off: famosos al horno, un programa culinario que produce RTVE donde también participa su hermano de madre, Julio Iglesias jr., curtido también en España y en otros países en diferentes talent shows. Por el momento, como decimos, es Chábeli Iglesias la única que no ha sucumbido a la tentación de impulsar su popularidad a través de la pequeña pantalla.
Chabeli Iglesias tiene una vida plácida con su marido, Christian Altaba, y así lo dejaba claro en su perfil de Instagram el pasado 8 de octubre, acompañando una foto de ambos: «Después de 22 años, solo quiero decirte que te quiero y siempre te querré. Soy muy feliz junto a ti», manifestaba a propósito de su segundo marido (recordemos que estuvo casada en primeras nupcias con el arquitecto Ricardo Bofill).
Chábeli Iglesias, con su hijo, en unas recientes vacaciones. /
El pasado mes de agosto Chábeli Iglesias compartía en la misma red social una fotografía junto a su hijo, Alejandro Altaba, con el que pasó unos días de vacaciones en Creta. En la misma aparecían la hija mayor de Julio Iglesias e Isabel Preysler, con su primogénito, Alejandro, quien en la actualidad estudia Derecho en la American University de Washington. Sin duda, esta vocación de ser abogado la llevaba en los genes puesto que su padre, Christian Altaba, y su abuelo también son letrados. Está previsto que acabe estos estudios en 2025.
Alejandro Altaba fue protagonista involuntario de la crónica social por lo complicado que fue su nacimiento. Disponer del avión privado de su abuelo materno, Julio Iglesias, fue determinante para que las cosas salieran bien puesto que Chabeli aún no había llegado al sexto mes de gestación cuando vino al mundo. De hecho, nació el 14 de enero de 2002, en la semana 24 de embarazo. Tan solo pesó 900 gramos, por lo que el bebé tuvo que pasar un tiempo en la incubadora.
Chábeli Iglesias junto a Christian Altaba con el que lleva más de dos décadas. /
Fueron unas navidades muy accidentadas y de alta tensión para la familia por esta circunstancia. Chábeli había disfrutado de estas tradicionales fiestas en Puerta de Hierro, en la mansión de su madre, y después viajó hasta Punta Cana para pasar también unos días con su padre. El vuelo de ida hasta Madrid sufrió unas turbulencias nada beneficiosas para Chábeli Iglesias, aunque a priori no parecía ser relevante. El 9 de enero, en el avión privado que le había enviado su padre, viajó a República Dominicana, donde pretendía pasar unos días de relax con el cantante de La vida sigue igual, su mujer, Miranda, y los cuatro hijos de la pareja, Miguel Alejandro, Rodrigo, Cristina y Victoria . No fue así…
Después de sentir contracciones, sufrir pérdidas de sangre y dolores muy intensos acudió al Hospital Bávaro de Punta Cana. Allí estuvo ingresada 12 horas hasta que su situación se estabilizó. Decidieron entonces que se trasladara hasta Miami en el avión de su padre, concretamente al Monte Sinai. En este hospital, sin embargo, le aconsejaron que acudiera al Centro Clínico Jackson.
El nacimiento de su hermana menor, Sofía, hace ahora once años, tuvo lugar en Carolina del Norte, donde Chábeli Iglesias y su marido se habían establecido. También fue un embarazo de riesgo y, de hecho, nació en el octavo mes de gestación. Pesó más de dos kilos. «Nos fuimos al campo, lejos del ojo público, con una vida más discreta y sedentaria. Durante un tiempo solo lo supimos nosotros, luego nuestros padres. Mis padres aún no la conocen, pero lo harán muy pronto. Ya he hablado con ellos y están felices», manifestaba en ¡Hola! la feliz madre sobre su pequeña, que cumplirá 12 años el próximo 4 de enero.
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