Fue, sin duda, uno de los grandes bombazos del pasado año. Charlie Sheen se sentaba en un plató de televisión y aseguraba que era portador del virus de Sida. Desde ese momento, más allá de la conmoción pública, se generaba un auténtico tsunami de declaraciones de varias de sus exparejas que aseguraban que este no les había puesto al corriente de su situación médica.
Por si aquello fuese poco escándalo, el actor acaba de protagonizar otra historia que va a ponerle, por enésima vez, en el centro de todas las miradas. Charlie se ha puesto en manos de un médico que ejerce la medicina en México por no haber obtenido la licencia para hacerlo en Estados Unidos y que le está sometiendo a un tratamiento alternativo con poca experimentación previa.
De nuevo sentado en un plató de televisión, ha sido el propio Sheen el que ha confirmado que se ha puesto en manos del doctor Sam Chachoua este ha manifestado: "Cuando Charlie llegó a mi consulta lo primero que hice fue sacarle sangre e inyectármela yo. Después le dije: 'Si no sé lo que estoy haciendo, entonces los dos estamos metidos en un buen lío'".
Sin embargo, los resultados no están siendo buenos. A pesar de que el paciente no lo recomienda, ha sentenciado: "No veo esto como una ruleta rusa ni como un rechazo permanente al tratamiento tradicional. No recomiendo a nadie que haga esto. Me presento a mí mismo como un conejillo de Indias".
Y añade Charlie: "Me siento genial. ¿Estoy arriesgando mi vida? ¿Y qué? Yo nací muerto".
Tras estas declaraciones, el doctor ha querido defenderse y ha mostrado en su web oficial una imagen, presuntamente de unos resultados de VIH de Sheen, en los que el resultado es negativo. Alega que, los mismos, se dieron tras haberse puesto en sus manos y haberse sometido a la terapia.
Chachoua va más allá y carga contra el hospital angelino Cedai-Sinai, donde Charlie ha sido tratado de su enfermedad desde que le fuera diagnosticada hace cuatro años: "Charlie hizo todo lo que le dijeron y si de verdad hubiese mejorado o llevado una vida normal, no hubiese recurrido a mí. Él nunca dio negativo en un test en el Cedars y sí lo ha dado conmigo".
20 de enero-18 de febrero
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