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"Te estoy llamando porque esto no se lo he dicho a nadie, pero esperaba que tu me ayudarás a decidir qué hacer... estoy embarazada". Esas son las palabras que Kendall Jenner pronuncia por teléfono con Kim Kardashian al otro lado y dentro del nuevo programa de su hermana Khloé.
Esta es una de las bromas que tenían preparadas para el 'show' y, la verdad, Kim tampoco le hubiese sido de mucha utilidad en el caso de que hubiese sido una noticia cierta, porque su contestación fue de quitarse el 'problema' de en medio y mandarla a que se lo contara a otra persona.
"No lo sé. No soy la persona a quien debas contarle esto. He tenido la peor experiencia y es muy reciente lo terrible que la he pasado con mi embarazo... Hoy no es el día, porque seré un poco más negativa ya que solo he dormido una hora, porque North estuvo despierta toda la noche y la estuve dando de comer cada dos segundos. He tenido un día de locos, no he dormido y me quiero morir. Dios mío, es tan difícil", era la respuesta.
Tras confesarle que era una broma dentro del espacio conducido por Khloé, la conclusión a la que llegaron es que a Kim lo único que le preocupa es lo que le concierna de manera directa y personal.