Bibiana Fernández durante la entrevista de 'En la tuya o en la mía'. / tve.

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Bibiana Fernández recibe a Bertín Osborne en la casa que pretende vender para pagar a Hacienda

La actriz la ha puesto en el mercado para solventar sus problemas con el Fisco. Allí repasará su vida junto al cantante.

Habló de ello hace muy pocas semanas en exclusiva a Corazón. Tenía problemas con Hacienda, aunque aseguró que se podían solucionar. "Sé que tengo que vender mi casa para arreglar las cuentas, pero el único problema es conseguirlo", decía entonces.

Y en eso está, en venderla. Pero mientras tanto, recibe a Bertín en su casa, lo que también puede servir como un inmejorable escaparate para mostrarla a posibles compradores. "Me da pudor hablar de estos problemas en público, porque tengo una vida privilegiada y pienso en los que no tienen ni para comer", confesaba también en nuestra revista.

Está acostumbrada a la fama, por eso no tiene reparos en hablar sobre nada. Y eso ha hecho con Bertín. Juntos repasarán la trayectoria de la icónica chica Almodóvar, un apelativo que le encanta. "Que a los 62 años te llamen chica me vuelve loca", dice a Osborne.

Con él ha hablado de su infancia y de los momentos difíciles de su vida. "Llegó un momento en el que, si había que sacrificar lo que fuera, y eso significaba padres, madres, familia… no importaba nada, porque eliges entre el mundo y tú. Y, entre el mundo y tú, siempre te eliges a ti", afirma con una franqueza envidiable.

Los hombres han marcado mi vida hasta hace diez años"

La misma que utiliza para hablar del amor. Confesará quiénes han sido sus grandes amores. "Los hombres han marcado mi vida hasta hace diez años o así. Y además bien. No tengo ningún rencor", admite la actriz. Además, recibirán la visita del locutor Carlos Herrera, que se meterá con ellos en la cocina para hablar sobre Bibiana, a quien le une una amistad que dura ya 25 años.

Así vio Bertín a Bibiana

"Da igual el nombre que elija Bibiana, la ropa que se ponga o la edad que tenga. Yo siempre encontraré en ella a la chica que me ha recibido esta vez. La chica que, desde pequeña, supo lo que quería y que emigró buscando su identidad. La misma que ha vivido tanto que ha podido morir mil veces. La mujer honesta y divertida que me ha abierto las puertas de su casa y de su vida".