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"No estaba muerto, estaba de parranda", cantaba Peret. Y algo parecido es lo que ha pasado con el novio de Olivia Newton-John, que este fin de semana era hallado tras once años -¡sí, once años!- en paradero desconocido.
En 2005, Patrick McDermott se fue a pescar y nunca más se supo. Tanto es así que, tres años después, tras una búsqueda infructuosa, le dieron par fallecido.
Ha sido gracias al programa de investigación de la NBC 'Dateline' como lo han localizado. Ya habían encontrado su rastro en 2009, en Puerto Vallarta y, ahora, ha sido en las playas mexicanas de Sayulita donde ha sido localizado.
Si en aquel momento Olivia tardó unos diez días en hacer pública la desaparición mediante un comunicaco en el que relataba lo "desgarrador" que estaba siendo afrontar la pérdida de su pareja, ahora él ha declinado hacer declaraciones.
Es más, ha pedido al programa que ha dado con él que le dejen en paz...
¿Qué pasaría por su cabeza para tirarse al mar y desaparecer dudante más de una década?