Enrique Iglesias habla de las secuelas que le dejó en la mano el corte del dron en uno de sus conciertos

Sucedió el pasado verano. Enrique Iglesias estaba ofreciendo un concierto y tuvo la feliz idea de coger con sus manos unos de los drones que sobrevolaban el escenario grabando imágenes. El resultado fue un aparatoso corte en la mano por el que tuvo que ser intervenido y que le ha dejado secuelas.

Ahora, en una entrevista radiofónica ha explicado cómo se sintió y cuáles son esas secuelas que padece. "La mano bien, quiero decir, fue muy estúpido. No sabes lo que me molestó. Me siento mal por la comunidad de personas amantes de los drones... ¡de verdad que sí! Hay mucha gente que le encanta volar drones, y yo empecé a volarlos y debería haber sabido hacerlo. Volvería atrás sabiendo lo que sé ahora sobre ellos, porque lo que hice en aquel momento fue irresponsable y he pagado las consecuencias", relata al ser preguntado por el capítulo.

Enrique, que asegura que su suerte fue "tener un buen doctor", pero que ha perdido la sensibilidad en una de las falanges del dedo corazón. "No como debería. Me rompí el hueso y no siento… No tengo sensibilidad en la punta, eso es un problema horrible", explica.

Iglesias, que asegura que en el momento del accidente no sintió dolor, cuenta cómo tras la operación, la sensación fue diferente: "Ya sabes como son los accidentes, suceden y no piensas en ello. Después de la cirugía... ¡me quería cortar la mano!".

Esperamos que, al menos, haya aprendido la lección.