Lo prometió: si la audiencia no la expulsaba en la primera noche, cantaba una de las canciones de Agustín Pantoja, 'Príncipe Azul'. Poco a poco Dulce, la que fuera niñera de Kiko Rivera y Chabelita Pantoja, se está soltando en la isla de 'Supervivientes'.
Quizá dosificando la información que posee y midiendo los tiempos para hacer caja -no olvidemos que cobran por semanas de estancia-, pero e stá comenzando a soltar la lengua y a dar algunos titulares que echarnos a la boca.
Lo primero es que, a pesar de acabar como acabó, no se arrepiente de los años que ha pasado al servicio del clar Pantoja: "No me arrepiento, por mi niña no me arrepiento por haber trabajado en Cantora. Hasta el día de hoy era por Isabel, pero por la última relación que ha tenido conmigo no".
Para continuar, deja muy claro que a ella no la echó nadie: "A mí no me ha echado Agustín Pantoja, me fui yo". Zanjaba así una de las grandes preguntas sobre ella que nos hacíamos desde hacía unos años.
Y en tercer lugar lanzaba un dardo envenenado a la tonadillera y a su familia, a la que se ha entragado en cuerpo y alma. "Mi espalda se quebró. Lo abarcaba todo y más mientras estaba sana. "Cuando mi cuerpo se rompió no había nadie. Empezando por ella".
Esto en cuanto lo que confesaba a Jorge Javier Vázquez, que aprovechó la conexión en directo para hacerle una pequeña entrevista a Dulce. Pero Mila Ximénez también fue capaz de sacarle información. En su caso, sobre Julián Muñoz.
"El poder cambia las personas y a él lo cambió el poder". Y añadía una frase reveladora, pronunciada por el exalcalde de Marbella, que deja claro que Dulce ha callado y aguantado mucho: "Me dijo una frase que tengo grabada: 'Vente por favor, vente por favor que te compraré una casa para que vengan tus hermanos'".
20 de enero-18 de febrero
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