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Ni se cayó -porque no la dejaron subirse a la cinta estática-. Tampoco intentó flirtear con el invitado -en el caso que nos ocupa, Willy Toledo- Alba Carrillo tenía un número especial, y solidario, preparado para la última noche de 'Hable con ellas'.
La modelo donó en directo los tres vestidos que utilizó el día de su boda a la Asociación MUM, que se dedica a acoger a aquellas mujeres maltratadas que necesitan huir de sus casas para evitar esos abusos.
Alba quiso dejar muy claro que no quería que su acto se interpretara como "una pullita" a Feliciano y que, en ningún caso, "la acción no tenía nada que ver con doble sentido o mensajes subliminal con respecto a mi expareja". Unas palabras que no han sentado nada bien en el entorno del tenista.
Después de todo un verano en el punto de mira, Carrillo ha decidido poner el punto y final al mismo con esta especie de catarsis con la que se libera de parte de su atadura y de sus recuerdos hacia Feliciano.