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Cuando el 'Daily Mail' publicó las primeras imágenes de Taylor Swift y Tom Hiddleston besándose, muchos alzaron la voz en contra de la cantante. Habían pasado un par de semanas desde que rompiera con Calvin Harris y no fueron pocos los que sostenían que ella siempre ha tratado de rentabilizar las relaciones.
Sin embargo, ahora que el noviazgo ha tocado a su fin, la versión se ha dado la vuelta. Hace un par de días, una fuente aseguraba en 'US Weekly' que había sido Taylor la que tomó la decisión de poner punto y final porque él quería exponer más la relación de lo que estaban haciendo.
Entonces, ¿quién pretendía sacar más provecho del romance? Los analistas de las redes sociales han advertido que, en este corto periodo de tiempo, Tom ha visto como sus 'followers' en Twitter han aumentado en un millón. Además, se abrió una cuenta en Instagram que, en estos momentos, cuanta con más de un millón cien mil seguidores.
Por si les parece poco, Hiddleston ha conseguido en este par de meses de ser un británico muy atractivo con un buen puñado de trabajos a sus espaladas y un apellido complicado de pronunciar, a aparecer en la lista de los posibles James Bond.
Veremos si la fama que ha conseguido durante el tiempo que ha estado al lado de Taylor se esfuma o es capaz de mantenerse en la cresta de la ola.