celebrities
celebrities
Hace tres años, el matrimonio acudió a una notaría para dejar fijadas unas condiciones pactadas en caso de separación de hecho. Algo que no se había producido hasta la fecha, a pesar de que, cada vez la convivencia era más complicada. Una vida en común en la que, por el fuerte carácter que tienen ambos, los enfrentamientos ganaban a las reconciliaciones.
Tras estudiarlo y hablarlo, David Bustamante (35) y Paula Echevarría (39) firmaron las condiciones que, a día de hoy, están siguiendo en este 'distanciamiento' que otros llaman un 'cese temporal', pero que tiene todas las papeletas de acabar en un divorcio o en una separación de hecho –escenario ante el que nos encontramos–.
Presentamos los tres puntos principales recogidos en ese documento que en su día firmaron y por el que hoy se rige su relación.
Padres de una niña de ocho años, en esas cláusulas se fijó que Paula se quedaría con la custodia de la menor, pero David tiene derecho a verla a diario, así como a compartir la mitad de todas las vacaciones de su hija. Los años impares elige el cantante qué días o meses prefiere, mientras que los pares lo hace la madre. También se recoge el disfrute de los fines de semana alternos y un pago de manutención mensual para la menor. Precisamente este es el único punto del acuerdo que firmaron que hoy podría modificarse. Sería en el caso de que Bustamante se decidiera por solicitar la custodia compartida, como algunos le están recomendando. Aun no hay una decisión al respecto, pero Paula no parece verlo con buenos ojos y, de ahí, que pudiera generarse un conflicto.
Otro punto firmado por ambas partes fue una cláusula de confidencialidad y no agresión en todo lo relacionado con su vida en común. Se trata de evitar a toda costa una guerra mediática y, a su vez, proteger la privacidad de sus años de matrimonio, impidiendo que se publiquen imágenes privadas o se relaten capítulos vividos como pareja. De esta manera, no solo protegen la tranquilidad de su hija al evitar tener unos padres enfrentados en los medios, sino que sus carreras profesionales tampoco salgan perjudicadas. El compromiso se ‘protegió’ hasta tal punto de que si una de las dos partes lo incumpliera, tendría que depositar una cantidad, que rondaría los 100.000 euros, en una cuenta bancaria para el futuro de la menor
También, se fijó la disolución de su patrimonio en común: la casa donde han vivido hasta ahora, en Villafranca del Castillo, y que compraron David y Paula al 80 y 20 por ciento, respectivamente. Entonces él era el famoso y tenía mejores posibilidades económicas, de ahí que aportara mayor montante. No habrá más disputas, ya que se casaron en separación de bienes y los dos tienen sus ingresos independientes por sus carreras. Bustamante compró también una casa de San Vicente de la Barquera (Cantabria), donde viven sus padres, pero de su propiedad. El piso de Madrid, que también ocupan sus padres cuando están en la capital, es de alquiler. Por eso ahora el artista busca otro alquiler para instalarse. El matrimonio está conforme en vender la casa en cuanto tenga una oferta interesante. Ya se barajó la posibilidad hace tres años, pero el mercado no era el propicio por la crisis inmobiliaria. Ninguno de los dos tiene intención de seguir allí, ya que, además de grande, es una casa costosa que necesitaría una reforma que nunca llegaron a realizar, precisamente por las continuas crisis, que comenzaron con la negativa de ella a tener mas hijos, algo que a él le costó asimilar.
2015: aquel fatídico verano para Paula Echevarría y David Bustamante
El refugio de David Bustamante
Bustamante-Echevarría, Sociedad Limitada
David Bustamante admite el distanciamiento con Paula Echevarría pero niega la ruptura
Paula Echevarría, sobre su separación: "No le voy a poner una definición"