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Tenían planes de boda, pero se truncaron ayer. Sebastián Palomo Linares entró en el quirófano el pasado viernes para someterse a una operación. La misma salió bien, pero la salud del diestro se torció con un derrame cerebral en la tarde del domingo que derivó en un coma irreversible.
A primera hora de la tarde de ayer, nos enterábamos de que Palomo Linares nos había dejado a los 69 años. Junto a él en todo momento estuvo esa mujer a la que iba a dar el 'sí, quiero' no tardado: la magistrada Concha Azuara.
La misma que no pudo reprimir su dolor a las puertas del Tanatorio de La Paz, donde familiares y amigos acudieron a lo largo de toda la tarde de ayer para despedir al torero y arropar a los seres más cercanos en este complicado momento.
Allí permanecieron, como Concha, los tres hijos que Palomo tuvo junto a Marina Danko, la mujer de la que se divorció en 2012 y con la que, en el momento de su fallecimieto, estaba enfrentado. Sebastián, Miguel y Andrés recibieron las condolencias de todos los que se acercaron hasta el tanatorio.
Las últimas declaraciones de Sebastián Palomo Linares antes de entrar en quirófano
Sebastián Palomo Linares, en coma irreversible por un derrame cerebral