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Fíjense en la foto, ¿qué les llama más la atención? ¿La extraña expresión de su cara o el abrigo? ¿El gorro o la combinación de todo con unas zapatillas de deporte? La imagen, tomada durante el festival de cine de Kazajistán, ha hecho arder las redes y ha vuelto a convertir a su protagonista en el hazmerreír del mundo. La mujer que le acompañaba en el certamen, por cierto, era la primera dama del país.
Y mientras surgían mil memes y chistes al respecto, el representarte de Nicolas Cage se negaba a ofrecer cualquier explicación. ¿Le obligaron a vestirse con el traje típico del lugar o se le ocurrió a él solito?, ¿de verdad se veía bien o un fuerte dolor le nubló la mente, le dejó ese gesto en la cara y le llevó a disfrazarse de esa manera?
Puede que nunca sepamos la respuesta a todas estas preguntas, pero tratándose de él, piensen mal y acertarán. Y es que, hablamos del mismo hombre que colecciona calaveras de dinosaurio y cabezas humanas jibarizadas, el que llegó a tener 22 coches, dos islas desiertas, dos castillos en Europa y 15 casas, una de ellas encantada, ya que su dueña torturó y asesinó allí a innumerables esclavos. Por tener, hasta tuvo como mascota un tiburón y un pulpo gigante, valorado en 150.000 dólares, y hasta ha construido ya su propia tumba: una pirámide de casi tres metros de altura en el cementerio de Nueva Orleans. Claro, que tanto disparate le acabó arruinando y en 2009 tuvo que reconocer que estaba pasando serios aprietos económicos después de pulirse una fortuna de 150 millones de dólares.
Tampoco su vida amorosa ha sido convencional. Con la actriz y modelo Christina Fulton no llegó a casarse, pero sí tuvo un hijo, Weston Coppola Cage, cantante de rock satánico que les ha dado bastantes disgustos. Este año, por ejemplo, estrelló borracho su coche contra un árbol. En 2009, Nicolas y Christina reabrieron la batalla de su divorcio. Ella reclamó al actor 13 millones de dólares porque, tras arruinarse, había dejado de cumplir los acuerdos .
La siguiente fue Patricia Arquette. Nada más conocerla le dijo: "Te quiero y voy a casarme contigo". Ella no se lo creyó y le pidió que se lo demostrara con una serie de pruebas imposibles, como conseguir un autógrafo del huidizo escritor J.D. Salinger, autor de El guardián entre el centeno. Él lo logró, así que después de unas cuantas broncas y rupturas, se acabaron casando. El matrimonio oficialmente duró cinco años, pero la realidad es que solo aguantaron juntos nueve meses. Su siguiente matrimonio, con Lisa Marie Presley, fue aun más corto: tres meses, y estuvo también lleno de peleas. Una de ellas, antes de la boda, hizo que ella arrojara al agua la alianza de 65.000 dólares que él le había regalado. Hasta intervino un equipo de submarinistas para encontrarla. Pero no hubo manera. Ella describió así la relación después: "Éramos como dos críos de 12 años".
Cuando conoció a su tercer mujer, Alice Kim, él había cumplido ya los 40 y ella tenía solo 19. Trabajaba de camarera y se casaron al cabo de los dos meses. La unión, eso sí, fue bastante más larga: 11 años, aunque igual de turbulenta y Cage incluso fue detenido por violencia doméstica. Al único hijo que tuvieron le llamaron Kal-El en honor a Superman, ya que ese es el nombre auténtico del personaje. Se divorciaron el año pasado y al actor no se le ha conocido otra relación, así que ya lo saben: si alguien busca una pareja original y capaz de sorprenderle todos y cada uno de los días de su vida, Nicolas está libre.
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