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A pocos días de coger en brazos a su segunda hija, Melissa Jiménez está feliz de su nueva vida en Sevilla. La periodista, casada con el futbolista Marc Bartra, nos cuenta sus planes de futuro.
Esto es lo que habló con nosotros la periodista.
Corazón Está ya en la semana 37 de embarazo y la vemos en plena forma, presentando el nuevo modelo Xplory del cochecito de bebé Stokke. Melissa Jiménez Ya me queda muy poco. Mi primer parto fue natural y llegó en la semana 41 y con este segundo, no tengo claro si me harán una cesárea, ya que la niña se tiene que dar la vuelta todavía. En cualquier caso, creo que aún me quedan algunas semanas. Por eso he podido acudir a esta presentación. Con mi primera hija, reconozco que llegaba muy verde a la maternidad y a todo lo que se necesita para el bebé. Usé estos cochecitos y repito porque me fue muy bien
C. En poco tiempo les han pasado muchas cosas. Una de las más difíciles fue hace justo un año, cuando el autobús en el que iba su marido, Marc Bartra, con el resto de jugadores, sufrió un atentado.. M.J. Sí, el 11 de abril Marc fue víctima del atentado contra el autobús del Borussia Dortmund. Yo estaba con unos amigos a punto de entrar en el estadio cuando recibí la llamada. Fue un momento horrible que quedará en nuestro recuerdo.
C. ¿Qué aprendizaje se saca después de vivir una experiencia así? M.J. El primero, que somos muy frágiles, ya que uno nunca sabe si está seguro. Hay que aprender a quitarse los miedos precisamente para poder vivir. El hecho de comprobar que en cualquier momento te puede pasar de todo, te hace ser más fuerte y valorar lo que tienes. Por supuesto, te das cuenta de lo que quieres a esa persona que podías haber perdido en un instante, y también compruebas que hay gente que te quiere y se vuelca en ayudarte.
C. ¿Quedan miedos en la recámara? M.J. No. Aprendes a ser fuerte y a encajar la realidad de lo que puede suceder.
C. Ese atentado que hirió a su hoy esposo coincidió con los preparativos de su boda, que celebraron el pasado 18 de junio en Argentona. ¿Cómo recuerda aquel momento? M.J. Fueron días de mucha ilusión. Estábamos en periodo de adaptación en nuestra nueva vida en Alemania. Para mí fue un cambio muy grande, ya que en Barcelona tenía mucha actividad y al tener tanto tiempo, decidí involucrarme a fondo en los preparativos junto a la wedding planner. Cada uno guarda los recuerdos de su enlace como el mejor día de su vida, pero es que en mi caso fue así. Es más, si hoy tuviera que repetir la boda la haría exactamente igual. Bueno, tal vez me cambiaría el peinado, porque pasé mucho calor con la melena suelta.
C. Se fue de Barcelona a Alemania y dejó su trabajo y su vida profesional. M.J. Eso fue lo que más me costó. Desde que empecé la carrera de Periodismo siempre había trabajado, primero como becaria y luego, cuando me instalé en Madrid, en algunos medios. Después estuve involucrada en el periodismo de motor, que era justo donde quería estar. Con el cambio, que fue una decisión de los dos cuando optamos por crear nuestra familia, entendí que al irme a Alemania perdía mi mundo profesional. Fue todo tan diferente que me afectó incluso psicológicamente, pero como soy una persona positiva opté por mirarlo con otros objetivos y disfrutar de mi hija y la boda. A mis 31 años, creo que tengo tiempo para retomar lo que dejé atrás.
C. Se han mudado a Sevilla tras el fichaje de Marc por el Betis. ¿Nacerá la niña en Sevilla o quieren repetir parto en Barcelona? M.J. Nuestra casa de Barcelona está en obras y reconozco que nos resulta más cómodo que nazca en Sevilla. Aún no tenemos decidido el nombre y eso que con nuestra hija Gala siempre lo tuvimos claro. Esta vez, hay muchas dudas.
C. Como catalanes que son no sé qué piensan de lo que está ocurriendo en Cataluña. M.J. Intento mantenerme al margen de la política porque son asuntos muy sensibles y hay tal exceso de información que he optado por no meterme en jardines. En los grupos de amigos, hay muchos que opinan sin saber y me niego a discutir con la familia o amigos por eso. En nuestra casa no se habla de política porque genera conflictos.
C. Al menos Marc y usted lo hablarán en la intimidad. M.J. No creas que mucho. Tenemos ideales parecidos, pero hay algunos puntos que no.
C. Debió ser un contraste pasar de Alemania a Sevilla. M.J. Pues sí. En Sevilla me he adaptado perfectamente y me siento feliz. Este año tenía ganas de ir a la feria y hasta encargué un vestido de volantes a juego con mi hija Gala pero con lo cansada que estoy a partir de las cuatro de la tarde, creo que solo se vestirá la niña. Yo lo guardaré para el año que viene.
C. ¿Se plantea recuperar su trabajo tras el verano? M.J. No me pongo fechas pero sí me gustaría encontrar una oferta que me atrajera, sobre todo algo relacionado con televisión o radio, incluso, prensa escrita. Aunque no me cierro puertas porque me divertí mucho cuando participé en un programa de Tu cara me suena.
C. Mitad italiana por parte de madre y española por padre. ¿Con quién se identifica más? M.J. Tengo de los dos y también de muchos países en los que hemos vivido. A veces bromeamos diciendo que éramos los primeros españoles por el mundo. Es verdad que Italia me encanta y allí he trabajado en el motociclismo. Soy admiradora de la mujer italiana del sur, fiel reflejo de mi madre, con carácter, pero me siento más española.
C. ¿Cómo es Marc? M.J. Dulce y sobre todo buena persona. Parece difícil, porque cuesta encontrar gente honesta, y la mejor descripción de él es que es honesto y auténtico.
C. ¿Cómo se conocieron? M.J. Fue a través de unos amigos, los hermanos Espargaró. Nos presentaron en una cena hará ya algo más de cuatro años. A los pocos meses, empezamos a hablar y hasta hoy.
C. ¿Fue un flechazo? M.J. Según él, sí, pero pasaron dos meses hasta contactar.
C. Forma parte de una generación de mujeres que ha roto barreras en la crónica deportiva, hasta hace poco protagonizada por hombres. M.J. Creo que hemos ayudado a que las que vienen detrás entiendan que no hay que tener miedo a entrar en un mundo de hombres. Pero incluso así, y con estos avances, sigo pensando que hay mucho machismo. Yo he vivido las diferencias que hay o el trato que nos dan cuando somos mujeres siempre con la superioridad de pensar que no sabemos de qué hablamos. Defiendo la incorporación de la mujer al mundo deportivo pero aún queda mucho por hacer, porque no nos otorgan la misma credibilidad, cosa que es injusta. En mi caso, te diré que de motos sabía igual o más que mis compañeros. Por eso veo que aún no está normalizado.
C. ¿Alguna vez se ha sentido intimidada por un jefe? M.J. Siempre he trabajado con hombres, pero me he sentido respetada porque además yo he marcado mucho. En lo profesional sí han intentado pasar por delante de mí solo por ser mujer pero, con mi carácter, no lo he permitido.
C. ¿De quién es la culpa? M.J. De los jefes. La audiencia siempre me ha apoyado y eso que el motero no es fácil de ganar. Seguramente es que faltan jefas.
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