celebrities
celebrities
Los viernes se han convertido en día de entretenimiento en televisión: tras el fin de 'TCMS' en Antena 3, TVE se apunta con 'La mejor canción jamás cantada'. Su productora, Gestmusic, es experta en formato musicales y, para esta apuesta ha decidido tirar de las mejores bazas de OT: desde su presentador, Roberto Leal, a la directora de la Academia, Noemi Galera, pasando por los ‘triunfitos’ más carismáticos (desde Alfred a Ana Guerra). Las galas tienen, como vimos esta semana, el aliciente de ser en directo y de contar con invitados de estilos musicales bien distintos, desde DVicio a El Kanka (rompe con la narrativa habitual con artistas en promoción). Cada semana se revisará una década. Comenzar por los 80 era una apuesta segura, sobre todo cuando se cuenta con guiños al pop vintage como la actuación de Vicky Larraz (y No controles con Olé Olé). Una app para votar, jurados rotatorios (como Ágatha Ruiz de la Prada), el guiño a los ‘youtubers’ con la colaboración de Jaime Altozano y la nota de humor a cargo de David Amor sirven de aliño a este cóctel de música y nostalgia.
Que Mediaset ha construido un microcosmos es una obviedad: todos los personajes que circulan por sus cadenas han estado con todos, así que al coincidir en sus ‘realities’ las infidelidades, los tonteos y los intercambios de mensajes –o de fluidos– salen a la luz. Basta con echar un vistazo a ‘GH DUO’ para asistir con asombro al descubrimiento de los antecedentes sentimentales de una peculiar fauna que, en cautiverio, parece comportarse de extraña manera. Incluso cuando uno no quiere seguirlas, las redes se encargan de hacer un seguimiento, generando un contenido complementario que acaba por alimentar la escaleta. Así, imágenes que podrían pasar desapercibidas por la dirección del programa son noticia: como el ’upskirting’ de Antonio Tejado a María Jesús Ruiz. Esa palabra anglosajona viene a definir la costumbre de mirar a mujeres por debajo de sus faldas. Es delito en muchos países. Y echando un vistazo a Twitter, uno descubre que el sobrino de María del Monte se lo ha tomado a guasa. No una vez ni dos… Y es repugnante. No es una broma, es un acto de acoso baboso que merece castigo. Por mucho repentino jugueteo sexual que esté viviendo esta pareja encelada, el respeto no puede perderse.
En un concurso, la formulación de las preguntas es clave: primero, para jugar; segundo, para entretener. En ‘Pasapalabra’ (Telecinco) lo tienen claro y han hecho del humor un elemento clave a la hora de construir cada una de las pruebas. Incluso recuerdo, hace años, un concurso que dirigí en un canal autonómico en el que la supervisión de las preguntas por parte de la cadena (había palabras o expresiones prohibidas) obligaba a los guionistas a devanarse los sesos para obviar la censura: así, lo que no estaba permitido preguntar aparecía finalmente en la respuesta, una pequeña trampa. Cuando un formato lleva años en activo, encontrar preguntas interesantes o divertidas es agotador. Se lo digo por experiencia. En ‘Boom’ (Antena 3) han decidido apostar por el autobombo, es decir, aprovechar que el programa es uno de los más vistos para promocionar series de Atresmedia: por un lado se juega con la fidelización del espectador, por otro se aprovecha el momento para hacer una promo que siempre viene bien. También se puede jugar con la viralización, para lo que se necesita llamar la atención de los seguidores de redes, como la versión de la RTL de ’Quien quiere ser millonario’, que hace de la letra de la canción una llamativa prueba
-