No hubo un derroche de amor exagerado en la alfombra roja de los Premios Oscar 2019, pero sí hubo un par de parejas que dejaron claro que, aunque se fueran de vacío a su casa, tenían quién les consolara. Porque Bradley Cooper no se soltó de la mano de Irina Shayk - todas las parejas de la alfombra roja-, pro Amy Adams se besó, a los ojos de los fotógrafos, con Darren Le Gallo.

Amy hizo historia en los Oscar, aunque quizás no por el motivo que le gustaría... Sí, la actriz es muy afortunada en el amor, tal y como hizo alarde ante los gráficos, pero en el terreno de los premios que otorga la Academia de Hollywood, no puede decir lo mismo...

Adams se convertía en uno de esos nombres que llevan colgados a la espalda la etiqueta de eternos nominados. Hasta seis veces pudo tener una estatuilla dorada entre sus manos... y se fue a su casa con el consuelo de tener mucha gente a su alrededor que valora su trabajo y la aprecia, pero no el reconocimiento de Hollywood.

Es cierto que Amy ha conseguido hacerse con un hueco estable en la meca del cine donde, además, ha sido contratada para todo tipo de papeles. Se maneja en todos los registros, pero parece mo ser suficiente para llegar a ese objeto de deseo que es el Oscar.

Seguirá intentándolo, no nos cabe la menor duda. Algún día, como le pasó a Leonardo DiCaprio, le llegará su hora. Puede llamarle y pedirle consejo para que la espera se haga más liviana y la paciencia no se le agote.

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