Ana Obregón acaba llorando al dedicarle un premio a su hijo, Álex Lequio

Tiene la sensibilidad a flor de piel. No es para menos. Se pasó seis meses en Nueva York al lado de su hijo, Álex Lequio, que luchaba contra un cáncer . Su vida fue ese. Alejada de su familia y viviendo por y para él. Siendo su único apoyo cercano. Teniéndose el uno a la otra. Y viceversa. Así que no es de extrañar que Ana Obregón se emocione.

Sucedió ayer. Ana recogía el Premio Naranja, otorgado al personaje del mundo del corazón más simpático por parte de la peña periodística Primera Plana. Con el galardón en sus manos, pronunció: " Quiero dedicarle este reconocimiento a mi hijo, que me ha dado una lección de vida. Por su sonrisa, su fuerza y sus ganas de vivir. ¡Va por tí, Alessandro! ¡Viva la vida!".

Y se emocionada. Ana, a la que seguramente se le vinieron a la cabeza esos malos tiempos, terminó por derramar unas lágrimas lógicas. También vimos cómo se le caían cuando se sentó delante de Carlos Sobera en 'Volverte a ver' y para contar esta dura experiencia.

La actriz, además, quiso reconocer el respeto y el cariño que ha tenido la prensa con ella y con su hijo durante todos estos meses. Para ello, esos medios de comunicación que hacemos la crónica social, nos merecemos un premio igual que el suyo. Lo dudamos. Obregón solo hay una, y ella también nos ha dado una importantísima lección en este año largo de pelea mientras la procesión iba por dentro.

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