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Las vacaciones de Semana Santa están para desconectar y estar con la familia. Este ha sido el plan de Sara Carbonero, que aprovechó sus días libres para volar hasta España y disfrutar unos días del aire de su pueblo, Corral de Almaguer (Toledo).
La lluvia no ha hecho mella en las vacaciones de la periodista que, lejos de preocuparse por el tiempo, para ella lo mejor de todo ha sido la compañía: "Pues por aquí ha hecho buenísimo", confesaba con una tierna foto de su hijo pequeño, Lucas, jugando al rompecabezas con su bisabuela. Así, señalaba que "90 años de diferencia no es nada", haciendo referencia a la relación tan estrecha y sincera que tienen a pesar de los años que les separan. Una preciosa manera de poner fin a estos días tan familiares.
Sara viajó a su hogar español acompañada de sus hijos, Martín y Lucas, pero sin Iker Casillas, que tuvo que ausentarse por trabajo, ya que jugaba el sábado en Oporto contra el Santa Clara.
A pesar de volver a la rutina, la periodista y el futbolista viven al lado del mar, un hecho que sin duda hace más fácil regresar al día a día sin resaca post-vacacional. Algo de lo que ha presumido Sara en Instagram, mostrando "el día después", un lugar paradisiaco en el que muchos darían lo que fuese por vivir.
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