Lucía Rivera ha sufrido un robo en plena calle. En Barcelona. Y más que la pérdida del móvil, que fue lo que le sustrajo el asaltante, lo que le duele a la modelo es el mal rato que tuvo que pasar. Unos instantes en los que el miedo recorrió su cuerpo de arriba a abajo y que ha querido relatar a sus seguidores de Instagram.
La modelo estaba visitando la capital catalana y había quedado para cenar con unos amigos. Antes de la cita, necesitaba sacar dinero, así que buscó en internet dónde había un cajero. Cuando llegó al lugar que le indicaba Google, no había ni rastro del mismo. Así que dio media vuelta para no llegar más tarde de lo que ya lo hacía a esa quedada.
Fue en el camino hacia el restaurante, cuando se cruzó con un chico debajo de un puente y tuvo lugar el desagradable incidente. "Se queda mirándome un tipo de frente, pero yo, como soy tan guay, iba haciéndome selfis con mi móvil, sola, haciendo el estúpido", explica Lucía en los 'stories' de su Instagram.
"Cuando me quise dar cuenta lo tenía detrás y me quitó el móvil con un movimiento suave y delicado. No me hizo daño. Lo fuerte es que llevaba el bolso abierto, muy lista yo. Corrí detrás de él 100 metros, podría haberle cogido, pero me dio miedo", añade, detallando cómo fue ese encontronazo en el que se envalentonó. "Lo que me consuela es que estoy viva, estoy sana, que no es poco la verdad", finaliza.
Un relato con el que la hija de Blanca Romero pretende concienciar a la gente sobre la importancia de andar con cuidado por la calle, máxime cuando una va sola y se encuentra en una ciudad que no conoce.
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