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Figuraba en todas las listas como una de las favoritas, pero esta vez Julia Roberts ni siquiera ha sido nominada al Emmy como mejor actriz por su trabajo en la serie 'Homecoming'. La forma de enterarse, además, fue un poco brusca. En la pantalla de su móvil apareció este titular de USA Today: "Los mayores desaires de los Emmy: Julia Roberts, George Clooney y Emma Stone entre las grandes estrellas que se han quedado fuera".
Su reacción, eso sí, fue impecable: hizo una captura de la pantalla, la subió a Instagram y escribió: "Por lo menos estoy con una compañía excepcional". Nadie diría que este gesto es el de una actriz que se describió a sí misma como "una niñata egoísta". Lo dijo en 2017 y se refería a su juventud. "Yo era mi prioridad", comentó también.
¿Qué ocurrió y que la hizo cambiar? Que en el 2000, mientras rodaba 'El Mexicano', conoció a su marido, el cámara Danny Moder. Aunque olvidó contar un pequeño detalle: ella entonces llevaba un par de años con Benjamin Bratt y él estaba casado con la maquilladora Vera Steinberg. En mitad del proceso de divorcio, a la actriz no se le ocurrió otra cosa que salir a la calle y ser fotografiada con una camiseta que ponía: "A low Vera". Frase que en inglés suena muy parecida a aloe vera, pero con la que estaba llamando mala, baja o vulgar a la ex de su futuro marido
La relación con Kiefer Sutherland también fue extraña. Ambos eran muy jóvenes, ella acababa de convertirse en una estrella gracias a Pretty Woman y se enamoraron hasta las trancas. Incluso iban a casarse, pero anularon la boda solo tres días antes. Existen distintas versiones sobre qué pasó. Unos dicen que él la engañaba con una estríper y otros que fue culpa del difícil carácter de la actriz. Sea como sea, Roberts no tardó en encontrar un sustituto y el día que tenían que haber celebrado la boda lo pasó con Jason Patric, un viejo amigo de él.
Peores son sus desencuentros familiares. Su hermana Nancy Motes se suicidó en 2014 tras años de problemas con las drogas y pocos días antes, se desahogó en Twitter contra la actriz, donde la llamó "zorra" y escribió este mensaje: "¿Quieres ser fan de alguien tan cruel? Ni siquiera es tan buena actriz". Su hermano, el también actor Eric Roberts, estuvo años sin hablarse con ella aunque ahora se han reconciliado y el año pasado, desde Vanity Fair, le mandó un mensaje muy claro: "Si no fuera por mí, no existiría Julia Roberts". Se refería a que él fue el primero en iniciar una carrera en Hollywood y quien le abrió las puertas.
Dejamos para el final sus broncas en el trabajo. "No es una buena persona", dijo de ella Nick Nolte. "Es tan caprichosa como un caballo de carreras", opinó Rupert Everett. Cuando rodó con Meryl Streep, obligó a que cambiaran el final para tener más protagonismo y en 'Hook', a las órdenes de Spielberg, se ganó el mote por el que muchos la conocen. Su papel era el de campanilla, 'Tinkerbell' en inglés, y todos la acabaron llamando 'Tinkerhell', que es lo mismo, pero como si acabara de salir del infierno.
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