Los expertos lo califican como una auténtica barbaridad que puede traer consecuencias negativas para la salud, pero Beyoncé no llegaba a tiempo y tuvo que agarrarse a esta dieta estricta que tan buenos resultados le había dado en el pasado. La artista no llegaba en su puesta a punto para actuar en el Festival de Coachella y decidió recurrir a ella.
La diva del pop consiguió bajar nada menos que 20 kilos en 22 días gracias a una dieta exclusivamente de vegetales -frutas, verduras, semillas y purés- donde todo producto animal o procesado quedaba desterrado desde el minuto uno. Ella misma lo ha contado y mostrado en su canal de YouTube.
Beyoncé aparece encima de una báscula que marca 79 kilos y, con el paso de las escenas -que se corresponden con el paso de los días en el calendario hasta completar su plan de 22 jornadas-, va disminuyendo hasta llegar a esos 57 que era su objetivo. Lo que no sabemos es si ha sopesado, además de las alertas que puede causar en su salud, el llamado efecto rebote.
"Definitivamente me empujé más lejos de lo que realmente podía, Aprendí una lección muy valiosa: nunca, nunca me empujaré tan lejos otra vez", confiesa Beyoncé en la grabación, asumiendo que se le ha ido de las manos el tema del peso y que lo que debe hacer es tener más cuidado con su alimentación.
Lo cierto es que no es la primera vez que Beyoncé recurre a este método. Ya lo hizo después del parto de sus gemelos y, en aquella ocasión, la realizó durante 44 días. Esperemos que esta vez haya aprendido y se lo tome en serio, dejando de poner en riesgo su salud.
- El challenge vegano de Beyoncé
- El momento más incómodo de Beyoncé en el baloncesto que se ha hecho viral