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No están siendo unos días fáciles en el clan Campos. Seguramente, de saber el revuelo que iba a organizarse, Edmundo Bigote Arrocet no hubiese dado la entrevista en la revista 'Semana'. O sí, pero se hubiese ahorrado la parte en la que retaba a quien tuviese alguna foto demostrando una infidelidad a María Teresa Campos a que la sacara.
Dicho y hecho. 'Sálvame' recogía el guante y comenzaba a liarse la madeja. Si bien es cierto que las fotos en sí no vieron la luz por una llamada que recibió el programa ayer a las cuatro de la tarde, sí hubo recreación de las mismas y testimonio, de nuevo, de Gema Serrano, la mujer con la que ya se relacionó al humorista en 2016.
En toda esta historia, la parte más perjudicada es, sin duda, María Teresa. Sobre todo, porque, tanto Gema como uno de los hijos de Edmundo, han llegado a decir que el chileno no la quiere y que está con ella porque es una relación cómoda. Unas palabras que, de haberlas escuchado, se le pueden haber clavado como un cuchillo.
Pero, al parecer, no las escuchó. O eso es lo que ha contado su entorno a 'Jaleos'. Aseguran que sus seres queridos han tomado la determinación de aislarla y que no se entere de todo lo que se está comentando sobre su relación estos días. Porque, como decía Arrocet en la entrevista que ha levantado la polvareda, lo somatiza todo y lo más importante es proteger la salud de María Teresa.
No ha hablado. Y no va a hablar. La matriarca de las Campos ha optado por la ley del silencio como mejor arma para defenderse de unos ataques que, seguramente, se frenarían si su familia dejara de ser protagonista de las portadas del mundo del corazón semana sí y semana también.
- Bigote Arrocet llega por fin a España para reencontrarse con María Teresa Campos