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Si una imagen vale más que mil palabras, la última que ha compartido Kim Kardashian en su cuenta de Instagram podríamos decir que tiene la capacidad de hacer enmudecer a cualquiera. Es más que evidente que la 'celeb' es una amante de los retoques estéticos, pero esta instantánea la deja al descubierto.
Kim ha querido subir una foto, rescatada de su álbum íntimo, de hace 20 años. No hay nada más que echarle un vistazo rápido para darse cuenta de que su cara no ha cambiado solo por el paso del tiempo, sino que los tratamientos y el quirófano han sido factores fundamentales.
" La vida sencilla... Ahí tenia 18 años. Khloé y yo condujimos hasta Arizona para visitar a Allison y Kourt", escribe junto a la instantánea, aunque el texto es lo de menos. Un mero accesorio para no dejar el hueco que Instagram brinda para llenarlo de letras y emoticonos. Bueno, sirve para contextualizar las imagen en su tiempo justo.
La cantidad de retoques a los que se ha sometido -en el cuerpo, que también ha abusado, en ciertas ocasiones, del Photoshop- solo los sabe ella. Algunos los intuimos, porque saltan a la vista, pero la modificación de su anatomía ha sido tal - rinoplastía, aumento de glúteros, inyecciones de plasma...- que puede que empecemos a enumerarlos y nos dejemos alguno.