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¿Pensaban que los hijos de Isabel Pantoja son los únicos que andan a la gresca todo el día? Pues no. Ya lo dijo Kiko Rivera, que lo único que pasaba era que el foco pasaba más tiempo sobre ellos que sobre otros, pero que entre los hermanos las peleas son más que normales. Ayer, en 'MasterChef Celebrity', se le dio la razón.
El 'talent' invitó a familiares de los concursantes para que les echasen una mano cocinando. La cara de Boris Izaguirre al ver a su hermana Valentina fue tremenda. Todo tenía explicación que comenzaba dando ella, que acababa de cruzarse medio mundo, desde Los Ángeles, para escenificar las paces.
"Vivo en Los Ángeles y hemos estado peleados un año y medio", empezaba ella para que Boris rematase la explicación: "Muy peleados. Hemos estado enfrentados. Vivimos una escena delirante en la puerta de un hotel de Los Ángeles y desde entonces no nos hemos hablado ni nos hemos visto".
"Tengo que pedirte perdón por la pelea. Somos hermanos que nos queremos mucho y no merece la pena estar peleados más tiempo", añadía él, que encontraba unas palabras de arrepentimiento similares en Valentina: " Te pido perdón por no haberte llamado antes". Y recalcaba que se había cruzado el charco para hacer las paces, pero también para ayudarle a ganar el concurso.