Desde hace meses, no existen las semanas tranquilas para Rocío Carrasco. Esta no iba a ser diferente. El ataque no le ha venido desde Honduras, donde su hija, Rocío Flores, participa ajena a que esa sentencia sobre la pelea en la que su madre salió muy mal parada ha salido a la luz. Tampoco su exmarido, Antonio David Flores, ha dicho nada que pueda hacerse revolver a Rocío, a pesar de que tiene una tribuna de lo más aprovechable en 'Sálvame'.
Tan solo hay que mirar a la revista 'Lecturas', a su portada de este miércoles, para ver esa declaración de Gloria Camila Ortega que supone el ataque definitivo a su hermana, a la que deja más que claro, que no la considera como tal. Unas palabras que habrán llegado a lo más hondo a Carrasco. O no. Puede que se haya construido una especie de caparazón para conseguir inmunidad ante estos dardos.
Sin tapujos. Sin refugiarse en la indirecta o el juego de palabras. "Rocío Flores es la hermana que no fue Rocío Carrasco", es el bombazo que se puede leer, salido de la boca de la hija de José Ortega Cano. Y si bien es un sentimiento que nos podíamos imaginar, el hecho de que lo haya verbalizado, no deja de ser un hachazo para la hija de Rocío Jurado.
Las relaciones familiares ya sabemos como son. Gloria hace muchos años que no se habla con Carrasco. Carrasco no se habla con su hija por ese enfrentamiento al que nos hemos referido al principio. Y tía y sobrina han sido capaces de trabar una relación de lo más especial que no han escondido nunca y que puede ser otra de las espinas que Rocío tenga clavadas de su hija.
En plena promoción de su espectáculo 'Que no daría yo por ser Rocío Jurado', no descartamos que haya una respuesta por parte de Carrasco, que ya ha advertido que no se ha quedado a gusto del todo con las pequeñas píldoras que ha ofrecido de su malestar familiar. Tiene delante una nueva oportunidad de desquitarse dando réplica al ataque más duro de Gloria Camila.