El cambio de imagen de Ana María Aldón desde que la conocimos, hace ocho años

Sucedió de manera casual. Ana María Aldón acompañó a su madre a una visita a Yerbabuena, la emblemática finca de José Ortega Cano, y el diestro se enamoró a primera vista. Para ella, fan tanto del diestro como de su difunta esposa, Rocío Jurado, fue como un sueño. Solo que, al despertar, era de verdad: uno de los toreros más famosos de nuestro país, quería empezar una relación con ella. Y de la amistad se pasó a lo que hoy vemos en los medios de comunicación.

La vida le ha cambiado mucho. Tanto como que ya no es frutera, la profesión que ejercía cuando Ortega Cano desplegó sus encantos para conquistar su corazón. Ana María estudió diseño y ya ha presentado alguna de sus colecciones. Fue después de dar el 'sí, quiero' a José (en 2018). Y mucho después de ser madre al lado de este.

Recordemos que su embarazo, pocos meses después de que empezara el romance y se hiciera público, trajo cola. Hubo quien no dudó en tachar a Aldón de 'cazafamosos'. El tiempo ha puesto a cada uno en su lugar. El de ella, además de junto a su marido, ahora también en el foco de los medios de comunicación.

Y en las redes sociales. Porque Ana ha cambiado tanto por dentro, en su vida y en su manera de relacionarse con la prensa (hasta el punto de embarcarse en esa aventura de 'Supervivientes 2020', donde ha resultado ser segunda finalista ), como por fuera. No solo lo decimos por el cambio de 'look' que se hizo en la isla y que es más que evidente.

La gaditana ha pasado por varias metamorfosis. En su pelo (el moreno, ahora es rubio platino) y en su cuerpo. Hoy, ha estilizado su figura. Es cierto que la dieta obligatoria de todo el que participa en 'Supervivientes' es un motivo de ello, pero Ana María ya llegó con menos kilos que con los que la conocimos cuando aterrizó en Honduras.