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Un verano atípico para los Reyes en Mallorca

Los Reyes y sus hijas han pasado sus primeros días recorriendo los pueblos de la isla y conociendo un proyecto educativo en la capital.

Los Reyes Felipe y Letizia con sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía. / Gtres

Hoy Corazón
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El pasado fin de semana don Felipe y doña Letizia aterrizaban en Palma de Mallorca para pasar unos días en la isla, como viene siendo habitual en la Familia Real desde hace décadas. La pandemia, que ha provocado además restricciones de viaje por países europeos cuyos ciudadanos suelen pasar los meses de calor en el archipiélago balear, ha convertido este verano en una época atípica.

A este hecho se suma la partida de don Juan Carlos, quien ha sido asiduo a los veranos en Palma hasta el pasado año. Quizá por todos estos cambios, el Rey y su familia han querido mantener la tradición e instalarse por unos días en Marivent, haciendo que sus paseos por la isla se conviertan en un reclamo turístico y en una forma de fomentar y mostrar que con cuidado y distancias, es posible un turismo seguro.

Porque entre las novedades de este año, está que tampoco habrá posado familiar en Marivent, sino que la familia del Rey ha preferido hacer distintas apariciones por la isla y así apoyar distintas causas y dar visibilidad a diferentes localidades.

Durante su primera jornada, los Reyes, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía recorrieron la localidad de Petra, en el interior de la isla. Allí visitaron la casa de Fray Junípero Serra y todos los ojos se posaron en la Infanta Sofía, que apareció con la rodilla vendada. La joven, de 13 años, sufría el pasado domingo un accidente en Marivent que parece que no ha revestido excesiva gravedad, pero que hizo que tuviera que recibir cinco puntos de sutura en la rodilla y apoyarse para caminar en la muleta y en su hermana que estuvo muy atenta a ella.

Al día siguiente, la parada tuvo lugar en Palma de Mallorca. La familia se desplazó hasta el barrio de Son Roca para visitar el Proyecto Naüm, una iniciativa socioeducativa que tiene como fin ayudar a jóvenes en riesgo de exclusión social. De nuevo, la Princesa y la Infanta fueron las grandes protagonistas gracias a su cercanía y su interés por cómo funcionaba el centro y los proyectos de los jóvénes.