Casi un año después de separarse de Borja Navarro, Chiqui se ha sentado en 'Sálvame' para gritar, alto y claro, que tanto este como sus padres no están teniendo una actitud adecuada con ella. Es más, denuncia que han sobrepasado los límites del buen talante y señala que ha recibido insultos y amenazas.

"Desde que yo me divorcié mis suegros ya no entran a mi casa, un día esta señora (su ya exsuegra) fue un día a buscar a mis hijas y se creyó Kung Fú Panda y me rompió una puerta", comenzaba el relato ante la mirada atónita de Jorge Javier Vázquez ante un capítulo que ella misma ya colgó en su día en Instagram para denunciarlo de manera pública ante sus 'followers'.

Así lo explicó en sus redes en su momento. / instagram.

Me dicen cosas muy feas que no deberían de escuchar mis hijas pequeñas"

"Yo no paso miedo pero me han llegado a pedir documentos como mi pasaporte, mi DNI.... y no sé para qué. Yo todo se lo digo a mi abogada y es que flipan", explicaba a la vez que manifestaba que había recibido insultos de todo tipo. Una actitud que no es de recibo, mucho menos cuando las niñas podrían estar comenzando a ser conscientes de esta situación. Y cuando Chiqui llegó a perdonar varias infidelidades de Borja (reconocidas por él).

" No quiero nada con Borja y no quiero verle. No soy una delincuente, igual creen que voy a dejar el país... Mi casa es mía y como en ella mando yo nadie entra que yo no quiera, pero me han roto la puerta. Me dicen cosas muy feas que no deberían escuchar mis hijas pequeñas. Estoy hasta el moño y está todo denunciado. De nunca me han querido", remataba su intervención Chiqui, que lo único que desea es que dejen que siga con su camino.