No han sido unas semanas fáciles para María Patiño. Todo empezaba con un mensaje , desde el sofá de su casa, a Mila Ximénez. Esta, dolida por el contenido del mismo, dejaba ver que su compañera estaba realmente obsesionada con su trabajo. Que no era capaz de desconectar ni los días que 'Sálvame' le da libres.
Patiño respondía, con un ataque de nervios, al día siguiente. En el mismo plató. Dando las explicaciones pertinentes y confesando que está muy enganchada a su trabajo porque tiene miedo a perderlo. Pero lo que no había confesado, hasta ayer, es el motivo real de ese temor. Porque lo hay. Y después de haber pasado una mala mañana que le hizo plantearse no ir a su puesto laboral, lo soltaba ante la audiencia de Telecinco.
María está atravesando unas circunstancias personales que han provocado que esté más susceptible de lo normal y que han desencadenado que, lo que en otras ocasiones hubiese sido uno más de los roces que vemos entre compañeros en las tardes de Telecinco, se haya convertido en un mundo. En un tema del que se lleva dos semanas hablando.
"Me veo muy frágil y muy vulnerable, hubiese hecho lo mismo de otra manera, pero ya ha pasado y no voy a sentirme mal", comenzaba Patiño, muy compungida y antes de añadir: " El trabajo siempre ha sido mi tabla de salvación". Por eso, le preocupaba que esa mañana, al levantarse, no le apetecía ir a 'Sálvame', y que solo una conversación con su director hizo que cambiara de parecer.
"Tengo mucha obsesión por el trabajo porque una vez le tuve que pedir dinero a mis padres y me enteré que, para dejármelo, mi padre tuvo que pedir un préstamo y eso me dejó muy triste. Me da vergüenza necesitar dinero", terminaba por confesar ese trauma que lleva sobre su espalda y que tiene a Patiño al límite.
20 de enero-18 de febrero
Con el Aire como elemento, los Acuario son independientes, graciosos, muy sociables e imaginativos, Ocultan un punto de excentricidad que no se ve a simple vista y, si te despistas, te verás inmerso en alguno des sus desafíos mentales. Pero su rebeldía y su impaciencia juega muchas veces en su contra. Ver más
¿Qué me deparan los astros?