"Voy a luchar hasta el final, tumbando a quien haga falta tumbar". La dura advertencia de Kiko Rivera sobre la herencia de su padre

La relación entre Kiko Rivera y su madre no pasa por su mejor momento y, una semana después del paso del 'DJ' por el 'Deluxe', donde una llamada de Isabel Pantoja puso en evidencia esas diferencias, él sigue dando pistas de por dónde van los tiros reales del distanciamiento entre ellos, que siempre han mostrado una imagen de relación compacta e indestructible.

Porque si bien la tonadillera se quejaba amargamente en directo de que se estaba enterando a la vez que la audiencia de Telecinco de que su hijo tenía depresión , este no tardaba en explicar públicamente que Isabel está tan preocupada de ser artista, que ha desocupado su papel de madre. Y eso es lo que haría provocado esa brecha, y no problemas de dinero o las intenciones de este de vender Cantora, como se había comentado en varias tertulias del mundo del corazón.

Sin embargo, parece que más allá de esa desatención emocional que podría haber hecho mella en el estado de ánimo de Kiko (reconocido por él mismo) el tema de la herencia de su padre y la circunstancia de que no habría recibido todo lo legado en esas últimas voluntades, sería el motivo principal de estas fricciones que han quedado expuestas a la luz. De hecho, Fran Rivera, que ha luchado junto a su hermano Cayetano para que Pantoja les diera lo que les correspondía de esos recuerdos del diestro, aseguraba no sentirse extrañado de que su hermano Kiko haya llegado a esta circunstancia.

Y el mensaje que este ha colgado en su cuenta de Instagram este fin de semana da pistas en ese sentido. Señala a que la guerra familiar tendría el legado del torero como eje central, y Kiko ha lanzado una advertencia ante su casi millón de seguidores para dejar bien claro que luchará para que se haga justicia. Caiga quien caiga por medio. Incluso si es su mismísima madre por la que tantas veces se ha partido la cara delante de las cámaras.

"Ojalá estuvieses aquí papá. Nada de esto estaría pasando. Tengo miedo de encontrarme con la verdad. Pero voy a luchar hasta el final tumbando a quien haga falta tumbar. Si ellos no supieron respetar tu voluntad, si todavía está en mi mano, te juro por Dios que yo lo haré. Te extraño tanto en estos momentos no sabes cuánto", se puede leer junto a una imagen en la que sale, de niño, en brazos de su padre. Un mensaje lleno de misterio y de dobles sentidos, de advertencias veladas, que hace presagiar una Navidad movidita.