Esta noche La isla de las tentaciones 3 se convierte en la isla del sexo por venganza

No podemos esperar ni un minuto más para el salseo de esta noche en el debate de La isla de las tentaciones , porque esta edición, la tercera, está siendo la mejor de todas sin lugar a dudas. Confiamos en que Telecinco nos permita a las 10:00 vislumbrar un poquito más de lo qué está pasando por las mentes y los cuerpos de Marina y su lobo , Lola y Simone y, debutando, los chicos y sus tentadoras.

Tras la primera hoguera de los chicos, estos decidieron espabilar (Jesús, directamente, ha dejado a Marina aunque ella no lo sepa aún) y tras la primera hoguera de las chicas estas decidieron vengarse (atención a esa Marina afirmando que “ella puede ser muy perra”). Tras el visionado de lo que estaban haciendo sus respectivas parejas tanto ellas como ellas llegaron a una insana conclusión: la situación requiere un poco de sexo por despecho para solucionarse. Pero es que la venganza, cuando se sirve en la cama con un tentador o tentadora, nunca es buena idea.

Así lo afirman dos psicólogas de la Universidad de Missouri, Lindsay Barber y Lynne Cooper, que se han dedicado a investigar qué nos pasa cuando tras un disgusto amoroso buscamos consuelo en otros brazos. Lo primero que descubrieron estas investigadoras del desamor es que lo de “un clavo saca a otro” es más común de lo que pensamos: en más de la mitad de las parejas que se rompen uno de los miembros recurre al consuelo del sexo rencoroso.

¿Les sirvió para algo lo de caer en la tentación? Pues, de momento, según ambas psicólogas este tipo de conducta solo sirve para chequear cómo andamos de autoestima y cómo de buena era nuestra relación. En sus estudios comprobaron que las personas que estaban menos comprometidas con su relación de pareja y aquellas que poseían una personalidad insegura eran las más propensas de caer en este tipo de sexo.

Además, ambas psicólogas advierten que existen diferencias entre el sexo por venganza y el sexo por despecho: el objetivo del primero es hacer daño a la pareja y el del segundo es aliviar el dolor del desengaño. No sabemos si las actitudes que muestran en piscinas, fiestas y dormitorios los participantes de esta edición de La isla de las tentaciones obedecen a las reglas del primer tipo o del segundo, pero está claro quién lleva la delantera en esta carrera: Manuel, que en la misma noche traicionó a Lucía con dos mujeres distintas. Y entre unos y otros hasta cinco veces saltó la alarma de las tentaciones. La que se avecina esta noche puede ser épica.