Las tres tragedias de Eugenia Osborne: la muerte de su madre, la pérdida de su hija y un divorcio anunciado

Puede que la mala racha sentimental que vive la familia Osborne se rompa en octubre, cuando Claudia, la pequeña (32 años) de las tres hijas de Sandra Domecq y Bertín Osborne , se case en Jerez con José Entrecanales Carrión. Pero, de momento, es tiempo de rupturas para la familia del presentador y cantante, él mismo separado de su segunda esposa Fabiola Martínez desde enero. Ahora le toca el turno a Eugenia (35), su hija mediana, quien acaba de anunciar su divorcio de Juan Melgarejo, tras 14 años de matrimonio. Y en 2017 vivió su propia ruptura Alejandra, tras un matrimonio de 13 años con Juan Buendía.

No tienen suerte en el amor los Osborne, aunque el amor paterno lo tengan más que asegurado. «Alejandra es una loca maravillosa; Eugenia es un sargento de la legión; Claudia es una mente extraordinaria, brillante, charlar con ella es muy interesante», las definió Bertín, con toda su pasión de padre, en una reciente entrevista.

La ruptura de Eugenia Osborne y Juan Melgarejo no ha sido una sorpresa para la mayoría. De hecho, la misma Eugenia había confesado en alguna ocasión que la pareja había vivido varias crisis y que debían confiar en su resiliencia para mantenerla unida. «Yo creo que el secreto está en no tirar la toalla, y tanto a mí como a mi marido se nos ha pasado por la mente más de una vez tirar la toalla en alguna ocasión«, llegó a reconocer Eugenia Osborne en una entrevista. «Pero es cuestión de no hacerlo y coger herramientas para superar esas crisis», insistió. Una buena razón para insistir en su relación fueron sus tres hijos, de nueve, ocho y cinco años.

Residentes en la exclusiva zona del Viso de la capital madrileña desde hace solo unos meses, parece que Eugenia Osborne busca ahora piso para ella y sus tres hijos, ya sin la participación de Juan Melgarejo. De hecho, parece que una de las razones del desamor entre la pareja han sido los constantes viajes de este, debidos a su cargo de CEO en una empresa dedicada al packaging. Sintomáticamente, en abril celebraron su décimo aniversario de boda con una escapada a un resort paradisíaco y Eugenia confirmó que el amor seguía en el aire. «El confinamiento nos ha unido mucho. Me ha hecho reenamorarme. A mí me encanta estar en su compañía, hablar con él...», aseguraba entonces.

No es esta, sin embargo, la primera tragedia sentimental que tiene que enfrentar Eugenia. A pesar de su juventud, ya ha tenido que superar pérdidas terribles, empezando por la de su propia madre. Sólo tenía 18 años cuando Sandra Domecq perdía la vida debido a un agresivo cáncer. Fue en 2004, y supuso un antes y un después para toda la familia. Bertín Osborne, que permaneció al lado de su exmujer brindándole todo su apoyo y cariño hasta el final de sus días, admitió que había sido la mujer de su vida y que de haberse casado a los 30 en vez de a los 20 no se hubieran divorciado. Eugenia sufrió muchísimo esta pérdida que puede estar detrás de su decisión de estudiar Psicología. De hecho, en 2013 montó un gabinete especializado en pacientes con cáncer, pero lo terminó dejando. «Era duro. Me costaba mucho», confesó.

La otra tragedia que ha marcado la vida de Eugenia fue la terrible muerte de una de sus gemelas, Leticia, a los seis días de nacer. Bertín Osborne la recuerda como uno de los momentos más duros de su vida. «Fue terrible entrar en la UCI y ver a mi hija con su niña en brazos, que ya había muerto, acariciándole la cara… Tuve que salir de allí porque me moría», admitió en una entrevista. La entrega maternal de Eugenia Osborne es total, y los niños que han sido la prioridad de su matrimonio con Juan Melgarejo lo son también ahora en su ruptura. En una reciente entrevista, Eugenia quiso sacar algunos parecidos razonables entre sus tres hijos y el resto de la familia. «Juanito es como su padre, muy constante y noble; a Sandra la veo más como mi hermana Claudia y como mi madre, espiritual y loca, y Tristán es como mi padre, tanto en el físico como en el carácter».