Felipa Jove es la presidenta del Patronato de la Fundación Jove. / Facebook felipa jove

La otra Marta Ortega de la lista Forbes: Felipa Jove, gallega, millonaria, discreta y marcada por una terrible tragedia familiar

Es una de las mujeres que integran la lista Forbes española. Es gallega, como Marta Ortega, pero muy discreta. Su vida está marcada por el espíritu trabajador de su padre y por una tragedia familiar que le costó superar: la muerte de su hermana mayor cuando tenía 37 años. Felipa Jove es una de las españolas más ricas del mundo.

Felipa Jove es gallega y con una fortuna de 500 millones de euros ha entrado a formar parte, el pasado año, de la lista Forbes de los 100 españoles más ricos, junto a su hermano, Manuel. Ella es la copresidenta de Inveravante, el holding familiar, presente en Brasil, Panamá, República Dominicana, Rumanía, México y Marruecos.

Felipa tiene 52 años y es hija del fallecido empresario Manuel Jove, fundador de la inmobiliaria Fadesa, y uno de los grandes empresarios españoles, que vendió la compañía justo antes de la crisis de 2008, lo que le permitió salvarse de la quiebra inmobiliaria. A continuación, creó el holding Invevarante. Manuel falleció en mayo del año pasado. Su hija Felipa figura hoy en el puesto 52 de la lista Forbes España.

Jove, al igual que Amancio Ortega, también gallego como él y con un perfil similar, fue un hombre hecho a sí mismo, que empezó trabajando desde niño en el taller de carpintería de su padre y fundó un emporio inmobiliario que vendió en 2007 por 4.000 millones de euros. Actualmente sus dos hijos Felipa y Manuel son copresidentes de Invevarante, dedicado a inversiones en construcción, viviendas, sector energético, hoteles y bodegas, entre otros sectores. María José, la hermana mayor y mano derecha de Manuel, falleció de un derrame cerebral en 2002. Tenía solo 37 años y era madre de dos niñas gemelas de cinco. Fue una tragedia que dejó marcada a toda la familia.

Jove creó una fundación, en su memoria, que hoy preside, Felipa y que está dedicada a proyectos sociales y educativos, centrados en los niños y las personas con discapacidad. Felipa le dedica casi todo su tiempo. En una entrevista con la revista «Fuera de Serie», confesaba hace unos años que la personalidad de María José era más «carismática» que la suya y que su papel había sido siempre ayudarla a ella. La Fundación incluye la colección de arte que reunió su padre, formada por más de 500 obras de 250 artistas, como Picasso o Kandinsky.

Otro de los proyectos que llevan desarrollando más de 10 años es el del Premio Bienal Internacional de Artes Plásticas Fundación María José Jové, que han obtenido creadores como Nuria Güell, Almudena Lobera, Miguel Ángel Tornero, Cristina Garrido, o Mar Vicente. Felipa, una apasionada del arte como su padre, se ocupa de gestionar también la colección, junto con el lado corporativo de Interavante. Ocupa más de veinte cargos en empresas del holding.

Manuel Jové se casó con 24 años con Amparo Santos, con la que tendría tres hijos, y montó una empresa de reformas. La empresa quebró, pero Jové no dejó de poner en marcha proyectos relacionados con la construcción, que, al final, le haría rico. En los años 90 fundó Fadesa de las cenizas de otra inmobiliaria y comenzó su gran despegue.

Felipa es una de las jóvenes herederas con más poder de España, pero es extremadamente tímida y discreta. Vive en A Coruña, junto con su marido y su hija Amparo, de 21 años. Está totalmente distanciada de los medios de comunicación. De ella se sabe poco, por ejemplo, que le encantan los perros y que, de niña, soñaba con ser veterinaria, aunque acabó estudiando Dirección de Empresas y un MBA en comercio internacional. Le encanta mantenerse en forma con el deporte y llevar una vida sana. Siempre insiste en que su día a día es muy «sencillo».

Al igual que su padre, Felipa cree en la familia y en la perseverancia y la humildad en el trabajo ante todo. Son los principios que su padre les inculcó desde pequeños a ella y sus hermanos. A diferencia de Marta Ortega, que se ha convertido en una «socialité» a medida que han transcurrido los años, Felipa no posa en reportajes de prensa internacional y no asiste a bodas de la «jet» española. Al menos de las que salen en las revistas. A pesar de todo, su cara es la más mediática dentro del imperio constructor. Felipa nunca ha rechazado un premio, especialmente si está conectado con la Fundación familiar, de la que se siente particularmente orgullosa, y ha concedido algunas entrevistas ligadas a la colección de arte y a los proyectos sociales que gestiona. De estilo sencillo, en el que sobresalen las camisas blancas, a Felipa le gustan también las chaquetas de estilo Kurta y la joyería étnica. Suele utilizar vaqueros a menudo y sobrios trajes sastre, a veces en colores claros, como el lila.