Muere el padre de Bertín Osborne, el aristócrata Enrique Ortiz López-Valdemoro: peleas, divorcios y reconciliaciones

Ha sido muy discreto y ha vivido muy apartado del foco mediático y así ha sido su partida. El padre de Bertín Osborne , el aristócrata Enrique Ortiz López-Valdemoro, ha fallecido a los 96 años, pero, por el momento, no se ha hecho pública la causa de su muerte. En realidad, falleció el día 18 de octubre y hasta ahora no se ha sabido.

Según ha informado El Debate, fue incinerado en la más estricta intimidad en el tanatorio de La Paz de Madrid. Sobre su figura podemos destacar que ostentaba dos títulos nobiliarios, VIII conde de Donadío de Casasola y VII conde de las Navas. Bertín Osborne, que en los últimos meses fue noticia por su paternidad con Gabriela Guillén , se ha mantenido por el momento en un discreto silencio.

Son duros estos momentos para Bertín Osborne, que ha tenido algunos baches de salud en los últimos meses. A la muerte de su padre, un dolor irreemplazable, debemos sumar la reciente desaparición de Ignacio Arizon, uno de sus mejores amigos en los últimos 50 años.

La madre del cantante, María Teresa Osborne y Marenco, murió en 1991. Una noticia que le afectó profundamente, incluso más que el bebé que perdió en su matrimonio con la recordada Sandra Domecq , como él mismo reconocería en el programa de televisión 'Planeta Calleja'.

Recordemos que Sandra Domecq murió víctima de una leucemia el 13 de agosto de 2004. Aunque estaban divorciados, seguían manteniendo una buena relación personal y para el cantante fue muy duro. Como anécdota, hay que señalar que el padre de Bertín no acudió a su boda con Sandra Domecq, que se celebró en 1977 porque en aquel entonces su relación no atravesaba su mejor momento.

A propósito de la salud del padre de Bertín Osborne, trascendió que hace unos meses tuvo un ingreso hospitalario porque no había reaccionado bien a una medicación, pero se recuperó a las pocas horas y pudo regresar a su domicilio, en los alrededores del estadio Santiago Bernabeu.

Igual de conquistador que su hijo, el propio Bertín Osborne había contado en un programa de televisión que su padre se había enamorado de una profesora de francés. Lo contó con mucha socarronería, con el estilo de humor que le caracteriza, para enfatizar también que « aunque tiene más años que un bosque», se encontraba estupendamente en todos los aspectos.

Tanto Bertín como sus tres hermanas, María Teresa, Marta y María de la Luz, estuvieron siempre muy pendientes de su padre. Enrique llevó hasta el final una vida plena y pese a su avanzada edad se encontraba aparentemente muy bien de salud y comía habitualmente en el mismo restaurante de su barrio.

Aunque la relación de pasó por algunas fases complicadas en su juventud, lo cierto es que padre e hijo se llevaron bien hasta el final. Como primogénito, se espera que Bertín herede el título de conde de Donadio de Casasola. Sin duda, Enrique ha dejado una enorme impronta en todos sus seres queridos.