Soplan vientos favorables para la Reina Sofía. Después de toda una vida marcada por la prudencia y la discreción, trabajando en la sombra y sin que se la oyera jamás un lamento en público, se ha convertido estos días en la figura protagonista de la Familia Real. Lo ha hecho al cumplirse el 40 aniversario de su gran obra solidaria: la Fundación Reina Sofía.
La efeméride ha coincidido con una nueva etapa de buena sintonía con don Juan Carlos, como se ha podido apreciar en los distintos actos a los que han acudido juntos en las últimas semanas. Y esta relación personal está ayudando a los padres del Rey a reconstruir la buena imagen institucional que les había acompañado durante los primeros 45 años de su matrimonio, pero que se había erosionado en los últimos diez.
Doña Sofía siempre se ha mantenido fiel al lugar que le ha asignado la historia en cada momento. Durante los 39 años del Reinado de don Juan Carlos ocupó el segundo puesto en el organigrama de la Familia Real. Y cuando se produjo el relevo en la Corona, pasó al sexto, por detrás de su hijo, don Felipe, su nuera, doña Letizia, sus dos nietas Leonor y Sofía, y su marido, don Juan Carlos.
Ese día también dejó de ser "la Reina", a secas, para convertirse en "la Reina doña Sofía", que es como se refieren a ella los documentos oficiales. Para los medios de comunicación es "la Reina madre" o "la Reina Emérita", aunque a don Juan Carlos no le gusta este último adjetivo. Lo cierto es que la palabra emérito, que se utilizó para distinguir a los dos Papas tras la abdicación de Benedicto XVI, no tiene tradición histórica en la Corona.
Desde entonces, tanto don Juan Carlos como doña Sofía dieron un paso atrás para ceder todo el protagonismo a los nuevos Reyes y, aunque la Reina madre ha seguido haciendo prácticamente lo mismo que antes, lo ha hecho en privado, sin cámaras ni periodistas que lo difundieran. Sin embargo, cuando están a punto de cumplirse tres años del relevo, la madre del Rey también ha visto cómo aumentaba estos días su actividad oficial.
Desde la abdicación, doña Sofía ha asistido a una treintena de actos cada año, pero solo en el último mes de mayo acudió a seis, el doble de los habituales. Además, en cuatro de ellos –cinco si incluimos la Primera Comunión de la Infanta Sofía– ha estado acompañada por don Juan Carlos y ha llamado la atención la buena sintonía que desprendían o las bromas que compartieron entre ellos. La mayor presencia conjunta en público de los padres del Rey coincidió con el 55 aniversario de su boda, aquella que se celebró en Atenas el 14 de mayo de 1962.
La imagen que transmitían las fotos de sus recientes apariciones juntos se vio reforzada después por unas palabras pronunciadas por doña Sofía en ese aniversario de su fundación: "Quiero agradecer también, muy especialmente, al Rey Juan Carlos el apoyo y el cariño con el que me dio la oportunidad de crear mi propia fundación y así poder trabajar en lo que más me podía ilusionar, ayudar a los más necesitados". Cuando la Reina terminó de hablar, el primero que se puso de pie para aplaudir fue él.
Ese acto también supuso una ocasión para que su hijo, el Rey, reconociera en público la labor solidaria que ha realizado su madre. Don Felipe ha tenido varias oportunidades de rendir homenaje a los Reyes, como hizo en los momentos más importantes de su vida: su boda y su Proclamación. También reconoció a su padre en la cena que las altas autoridades del Estado ofrecieron en su honor cuando cumplió 70 años. Entonces, el todavía Príncipe, tomó la palabra por sorpresa y dijo aquello de "gracias, querido Patrón".
Ahora, el aniversario de la Fundación Reina Sofía le ha permitido recordar en público la gran aportación de su madre a los 40 años de Democracia, y que consistió en aprovechar esa etapa de "indudable progreso económico" para "proyectar solidaridad". Y es que, aunque no tengan funciones constitucionales, también las Reinas consortes tienen mucho que aportar.
20 de enero-18 de febrero
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