Las ausencias y presencias de la Reina Letizia

Los Reyes realizaron la pasada semana una visita de Estado a Perú en la que han recibido los máximos honores por parte del presidente de la República, Martín Vizcarra, y su mujer, Maribel Díaz. Sin embargo, la visita empezó y terminó con algunas peculiaridades. De hecho, el Rey viajó solo hasta Lima, donde ya le estaba esperando doña Letizia en el hotel. Y es que don Felipe voló directamente desde París, donde el domingo de la pasada semana acudió a los actos conmemorativos de la I Guerra Mundial, y a ese viaje no le acompañó la Reina.

El Palacio de La Zarzuela justificó su ausencia en los actos de la capital francesa porque solo estaban invitados los jefes de Estado y de Gobierno. Sin embargo, varios mandatarios acudieron junto a sus esposas, empezando por el anfitrión, Emmanuel Macron, que recibió a sus invitados junto a su esposa, Brigitte. También fueron la reina Matilde de Bélgica, la Gran Duquesa de Luxemburgo, la princesa Charlene de Mónaco y la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, por lo que la presencia de la Reina de España no habría sorprendido a nadie.

Lo más llamativo de todo fue que la ausencia de Doña Letizia en París fue rápidamente ocupada por la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, que tampoco había sido invitada, pero que decidió apuntarse a la cita. Mientras la Reina mide cada uno de sus viajes con el objetivo de que nunca se la pueda acusar de hacer turismo con recursos públicos, y valora cuidadosamente si debe acudir o no por razones de representación institucional, la esposa del presidente parece tomar sus decisiones con criterios más personales.

Y es que Begoña Gómez también tenía previsto acompañar a su marido a la Cumbre Iberoamericana que se ha celebrado estos días en la ciudad de Antigua (Guatemala) y, según algunas fuentes, no se descarta que viaje con el presidente del Gobierno a Cuba. Lo cierto es que la Reina doña Sofía sí acudía a la Cumbre Iberoamericana porque en su época existía un programa paralelo para las primeras damas. Sin embargo, hace ya años que desaparecieron estos programas y Doña Letizia dejó de acudir, al no tener ningún papel en esos encuentros de jefes de Estado y de gobierno.

El caso es que como doña Letizia no acompañó al Rey a los actos de París, en lugar de trasladarse a la capital francesa para viajar desde allí a Lima en el avión oficial, prefirió trasladarse desde Madrid a Perú en un avión de Iberia. Ello provocó que la visita de Estado no empezara con la tradicional imagen de los Reyes bajando juntos la escalerilla del Airbus.

En esta ocasión, la primera foto de los Reyes juntos en Perú se tomó en el Panteón de Próceres de Lima, donde hicieron una ofrenda floral antes de protagonizar la ceremonia de bienvenida que les brindaron sus anfitriones en la imponente plaza de Armas del Palacio de Gobierno de Perú. doña Letizia deslumbró en su primera aparición pública en Lima con un elegante vestido negro con rayas blancas diseñado por Carolina Herrera.

Sin tiempo para cambiarse, la Reina acudió con ese mismo vestido, tras el almuerzo oficial, a visitar el Centro de Emergencia Mujer. Allí conoció la labor de estos centros, que atienden en Perú a cerca de cien mil mujeres maltratadas y vulnerables cada año. Entre otras, atendieron a la española Patricia Aguilar Poveda, la joven que permaneció 514 días en la selva, secuestrada por el líder de una secta, Félix Steven Manrique Gómez, con el que tuvo un bebé.

La segunda jornada de la visita incluyó un foro económico, que inauguró el Rey; una cita solidaria con jóvenes con escasos recursos o discapacidad motora, y una cita cultural en la que se presentó la nueva edición de la Feria de Arte Contemporáneo ARCO, que tendrá a Perú como país invitado. Además, los Reyes ofrecieron la tradicional recepción a la colonia española que reside en el país andino.

Igual que llegó, doña Letizia también abandonó Lima en un avión de una línea comercial, ya que el miércoles la Reina emprendió regreso a Madrid mientras que el Rey continuó viaje hacia Antigua en el avión oficial para asistir a la Cumbre Iberoamericana. Además, doña Letizia no se quedó al último acto del programa de la visita de Estado, y no acompañó a don Felipe a visitar las instalaciones de la compañía española Repsol en La Pampilla. Desde allí, el Rey partió a Guatemala en el mismo avión que había llegado.

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