Todo preparado para un nuevo bautismo royal este fin de semana: así será el bautizo de Julien, el hijo del príncipe Carlos Felipe y la princesa Sofía de Suecia

Nació en marzo pero ya está listo para bautizarse. Julien, el tercer hijo del príncipe Carlos Felipe de Suecia y su mujer, la princesa Sofía, será bautizado este sábado como todo un royal: con faldón centanario y en un palacio. Aquí tienes los detalles.

No todo son escándalos amorosos, matrimonios con plebeyos y consortes huidizos (léase Chris O'Neill) en la corte de Suecia, también hay ocasiones en las que la familia real sueca se reune en pleno para festejar las buenas noticias y este fin de semana será una de esas ocasiones. El sábado 14 de agosto está previsto la celebración del bautizo del hijo menor del príncipe Carlos Felipe y la ex Sofía Hellqvist reconvertida ya en toda una princesa. El pequeño Julien Herbert Folke nació el pasado 26 de marzo y ya está todo listo para que se pueda bautizar. esyo es todo lo que sabemos sobre cómo va a ser la ceremonia.

La ceremonia religiosa tendrá lugar a las doce de la mañana en la capilla del castillo de Drottningholm, residencia actual de los reyes y abuelos de la criatura el rey Carlos Gustavo y la reina Silvia y el lugar donde el príncipe Carlos Felipe se crió junto a sus hermanas.

La familia real sueca, en pleno, acudirá al bautiza del pequeño Julien. / gtres

Aunque la familia real al completo asistirá al bautizo, lo que ha puesto los dientes largos a los fans de los royals, la ceremonia en sí, de menos de una hora de duración, no será retransmitida por la televisión nacional (cosa que sí ha sucedido en ocasiones anteriores). Seguramente la decisión del rey Gustavo de restringir la familia real a él, la reina Silvia, su heredera y los hijos de la princesa Victoria haya tenido mucho que ver con esta particularidad.

Con lo que sí se cumplirá la tradición al 100% es con el vestuario con el que el pequeño va a recibir su bautismo: un faldón utilizado por primera vez en 1906 por el rey Carlo Adolfo, el agua que se usará en el bautizo proviene de un manatial situado en la finca en la que la familia pasa sus vacaciones de verano y cuando acabe la ceremonia religiosa su abuelo le conferirá con sus porpias manos la Orden de los Serafines, el solo puede conceder el propio rey y que se reserva para jefes de estado que hayan realizado grandes actos de servicio por Suecia o miembros de la familia real.

Todo un honor para un bebé de seis meses que no es alteza real y no se podrá ver en televisión... aunque en realidad l o que nos interesa es qué llevarán puesto las princesas suecas en esta ocasión, ¿o no?