Charlène fuera de Mónaco y un complot contra los amigos del príncipe Alberto II ponen en jaque a los Grimaldi

Desde 2021 se gesta un escándalo en Mónaco y no tiene que ver con la nueva huida de la princesa Charlène: el príncipe Alberto II denuncia un complot en contra de sus amigos más íntimos.

El príncipe Alberto II de Mónaco ys su sobrina Carlota Casiraghi en un acto oficial del principado. / gtres

Silvia Vivas
Silvia Vivas

Los problemas no cesan para el principado más pequeño de Europa. No contento con tener que capear el temporal por su supuesto divorcio de la princesa Charlène (de nuevo un medio italiano, esta vez el Corrière della Sera, afirma que la princesa «huyó» de Mónaco el 21 de marzo y vive en Córcega), su juicio pendiente en Italia por una supuesta tercera paternidad secreta y gestionar una pandemia, ahora ha trascendido un escándalo que afecta al círculo de confianza del príncipe Alberto II de Mónaco y que ha puesto en jaque su reinado en un complot digno de haber sido orquestado por su tía Antoinette Grimaldi .

Las víctimas directas de la campaña de difamación que ha desestabilizado el gobierno del principado ataca a cuatro de las personas de confianza de Alberto de Mónaco: Didier Linotte, presidente de la Corte Suprema monegasca; su mano derecha Laurent Anselmi, que desde enero de 2022 es su jefe de gabinete y anteriormente ejercía de ministro de exteriores; Claude Palmero, el contable que gestiona los bienes de los Grimaldi desde 1987 y Thierry Lacoste, el abogado de toda la familia que lo mismo asiste al Festival de Circo monegasco que defiende a Estefanía de Mónaco en los juzgados (o al príncipe Alberto en las demandas de paternidad ).

Quiénes son los amigos del príncipe Alberto de Mónaco bajo sospecha

Desde otoño de 2021 una página web anónima (y un canal de Youtube) se ha dedicado a filtrar en una versión monegasca de Wikileaks documentos que retratan a este «club de los 4» como una mafia al servicio de los intereses inmobiliarios de dos empresas. Las informaciones vertidas en Les dossiers du Rocher retrata al círculo de confianza de Alberto II como un equipo de conspiradores que gobiernan realmente y en la sombra el principado cobrando billones de euros bajo cuerda y en las mismas narices de Alberto de Mónaco que queda retratado como un gobernante débil.

«Condeno esta campaña difamatoria y anónima de falsos rumores y calumnias que tiene como objetivo a varios servidores del Principado», aseguró Alberto de Mónaco en el periódico Le Monde, el mismo medio que destapó al gran público los entresijos del complot contra el cabeza visible de los Grimaldi y su equipo de gobierno.

Poco más le queda al príncipe monegasco que el derecho a la pataleta pública y el poner en marcha una investigación en Francia y otra en Mónaco para esclarecer quién está detrás de las informaciones vertidas en Les dossiers du Rocher. De momento lo único que han podido descubrir es que la página web se ubica en un servidor islandés y que para darle más notoriedad su creador pagó millones de euros para aumentar artificialmente el número de visitas a estos contenidos mediante bots. Un complot solo al alcance de un millonario.

Quién podría estar detrás del complot contra Alberto de Mónaco

En el trasfondo de este extraño complot se encuentra el jugoso negocio inmobiliario en La Roca. El pequeño principado puede presumir de ser una auténtica Disneylandia para ricos, pero también de tener uno de los negocios inmobiliarios más suculentos del mundo. En Mónaco se ubican los apartamentos más caros del planeta (más de 300 millones de euros) y el metro cuadrado cuesta, de media, 100.000 €. Asegurarse un proyecto inmobiliario en Mónaco es asegurarse una fortuna y no es extraño ver a los Grimaldi participando en este tipo de negocios ( Pierre Casiraghi sin ir más lejos se gana la vida con ellos).

El problema es que en Mónaco hay pocos metros, pocos proyectos y una empresa, la de Patrice Pastor , que aspiraba a quedarse con el más jugoso de ellos: el de la explanada de los pescadores, un complejo de edificios destinados a «robarle» metros al mar. En un intento de diversificar el número de empresas que actuaban en el principado finalmente se decidió conceder la jugosa explanada a una constructora «menor», Caroli, y con este sencillo movimiento toda la historia se complicó.

La propuesta de Caroli para la explanada afectaba al recorrido tradicional del premio de Fórmula 1 que se celebra en el principado y esto hizo que el proyecto se retrasara, ocasión que un alto cargo monegasco afín a Patrice Pastor aprovechó para quitarle la concesión a Caroli y dársela a Pastor. El movimiento, obviamente, fue denunciado em los tribunales y juzgado por uno de los damnificados del wikileaks monegasco, el juez Didier Linotte, que acabó dando la razón y el proyecto, de nuevo, a Caroli y obligó al principado a pagar una multa por el movimiento de su político.

Vídeo. Las razones por las que Charlène no qería volver a Mónaco

Alberto de Mónaco respondió al juicio concediendo a Caroli, además, la construcción de una torre en el principado para hacer frente a la indemnización estipulada por el juez y despidiendo al alto cargo que le había metido en problemas. Dio el tema por zanjado declarando « hay suficientes obras en Mónaco para satisfacer a todos». Pero en realidad no debe de haberlas habida cuenta del ataque que están sufriendo sus afines desde ese momento.