Los Sussex quieren ir a Sandringham por Navidad: las claves de una posible reconciliación con Carlos y Camilla

Los Sussex siguen moviendo ficha para acercarse al núcleo duro de los Windsor desde el otro lado del océano por muy mal que le siente al príncipe de Gales, Guillermo, y su esposa, Kate Middleton . Su siguiente paso, según los medios gossip angloparlantes, es que el príncipe Harry y Meghan Markle quieren pasar la Navidad en el escocés Sandringham mano a mano con Carlos III y Camilla . ¿Hay alguna posibilidad de que lo consigan?

Algunos, los más optimistas sin duda dada la complicada situación en la que se han colocado el príncipe Harry y Meghan Markle, esperaban a la pareja (o al menos al hijo menor del rey) en las celebraciones del cumpleaños de Carlos III la semana pasada. No puedo ser.

El siguiente paso lógico en este acercamiento con reconciliación padre e hijo incluida que algunos anhelan es pensar en las fiestas de fin de año. Por ello ya se oyen voces y rumores sobre si los Sussex y sus hijos cuasi invisibles compartirán Sandringham esta Navidad con su yayo real.

Para conseguir su objetivo (o dejar mal al rey si se niega a este tierno reencuentro generacional), los Sussex han seguido su ancestral técnica de lanzar globos sonda a través de los medios de comunicación. El periódico The Times publicó hace apenas un par de días que una fuente bien informada y cercana a Buckingham afirmaba que los duques «exiliados» habían dejado claro que aceptarían de buena gana una invitación navideña. Queda por ver si esta se produce.

No sería la primera vez que un «apestado» de los Windsor encuentra refugio en tierras de Norfolk. No olvidemos la desconcertante presencia del príncipe Andrés , el otro outsider real por antonomasia, en la misa del 25 de diciembre del pasado año en el castillo de marras.

Quizá los buenos recuerdos que los Windsor han compartido en su fortaleza del este de Inglaterra hace que sea el campo de batalla propicio para firmar también la paz con los Sussex, (y si algo saben hacer bien los duques de Hollywood es escoger sus batallas y dónde combatirlas).

Afirman los medios angloparlantes que Harry aprovechó su llamada de felicitación a su padre por su cumpleaños para sacar el tema e incluso dejarle caer que serían capaces de hasta abandonar Estados Unido en verano para pasar unas vacaciones con el resto de la familia en el poco soleado Balmoral.

La noticia de la posible visita navideña de los Sussex ha levantado todo tipo de especulaciones entre los expertos en la casa real británica. Al frente de los más optimistas se encuentra Omib Scobie, autor del polémico libro en el que se analiza la relación entre el príncipe Harry y su hermano Guillermo «Endgame» que se publicará el 28 de noviembre. Para Scobie la reconciliación de Harry no sólo es posible sino que está cerca, y eso ha afirmado en las páginas de la revista People.

«Aún hay calidez entre Harry y su padre», afirma en exclusiva para el medio norteamericano en el que, además, afirma que mientras el vínculo entre Harry y su hermano es posible que se haya roto para siempre, en contraparte el duque de Sussex sigue en contacto con su padre. De hecho, al parecer hasta Meghan Markle continúa manteniendo correspondencia regular con su suegro y le envía fotos de sus nietos.

Del otro lado, como no, están los tabloides británicos que afirman que si los Sussex esperan una invitación a Sandringham, que esperen sentados. Medios como el Daily Mail afirman que la sugerencia de los Sussex no ha sido bien recibida por el entorno de palacio que consideran el plan de Harry un «bombardeo de amor extraño» después de haber arrastrado el nombre familiar por Netflix. Especialmente cuando en el pasado recibieron invitaciones para Balmoral y Sandringham y los Sussex decidieron no ir.

Oficialmente la última vez que el príncipe Harry vio a su familia y, por supuesto, a su padre fue el día de su coronación . Y la última vez que Meghan Markle puso un pie en una celebración navideña de los Windsor fue en 2018. ¿Pueden cinco años de ausencia y una deserción de palacio compensarse con una videollamada?

Todo depende de si a Carlos III le conmovió ver a sus nietos californianos cantarle el cumpleaños feliz a dúo en esa videoconferencia o no. Algo que entra dentro de lo probable ya que el Sunday Mail filtró que el rey había informado a su entorno de que quería pasar más tiempo con sus nietos.

En el pasado ya demostró que haría lo necesario para satisfacer ese deseo y ejerció activamente su papel de yayo con los hijos de su primogénito, como cuando reformó la casa del árbol que usaban sus propios hijos en su residencia de Highgrove para que la pudiera disfrutar su nieto George .

Desde que fue coronado, Carlos III visita todos los viernes Windsor, un lugar que no es precisamente de sus favoritos, para estar más cerca de los hijos de Kate Middleton y Guillermo y poder visitarlos por la tarde. ¿Le tocará el turno esta Navidad a sus nietos americanos? Sólo el rey puede imponer su voluntad a la negativa tajante del príncipe de Gales del retorno de los Sussex.