Irene Urdangarín: así podría afectarle el supuesto divorcio de la infanta Cristina e Iñaki (tras el escándalo de las fotos con otra mujer) a su hija favorita

El nacimiento de Irene Urdangarín hace 16 años fue un auténtico regalo para la familia Urdangarín-Borbón. Por fin había llegado la niña, el cuarto hijo de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín tras tres varones, sus hermanos Juan, Miguel y Pablo. Ahora Irene Urdangarín sigue colmando de orgullo a su familia por su belleza, discreción y buenas notas. Pero, a pesar de vivir todos separados, cuando parecía que las aguas familiares volvían a su cauce después del paso por la cárcel del ex duque de Palma, un nuevo escándalo sacude a la familia de la hermana del rey Felipe VI: Iñaki Urangarín podría estar siéndole infiel a Cristina de Borbón con una joven rubia misteriosa y el divorcio, tantas veces anunciado, podría ser pronto una realidad.

Irene nació el 5 de junio de 2005. Cuando le preguntaron a Iñaki Urdangarín a la salida de la clínica Teknon de Barcelona si ella sería la última de la pareja, no dudó: «Estamos muy felices, cumple todas las expectativas del planteamiento de familia que nos habíamos hecho». En aquel momento la reina Sofía se encontraba en París, donde estaba viendo un partido de Roland Garros en el que participaba Rafa Nadal, pero lo dejó todo para correr a Barcelona y conocer a su última nieta, la única hija de la inafnta Cristina. Su nombre, Irene, era un homenaje a la hermana de doña Sofía. «Es un nombre que siempre nos gustó por su significado y su belleza», explicó su padre, Iñaki Urdangarín. Tanto don Juan Carlos como doña Sofía estaban encantados de que fuera una niña. Era su sexta nieta.

Irene nació tan solo unos meses antes de que lo hiciera su prima Leonor, la heredera al trono. Sus vidas no han podido ser más diferentes. Irene es la décima en la línea de sucesión, tras sus hermanos, su madre, sus primos Victoria y Felipe, la infanta Elena y la infanta Sofía, pero su vida ha sido muy tranquila y discreta. Hasta ahora. Al ser la pequeña de los Urdangarín Borbón ha vivido mucho más alejada que sus hermanos de los problemas judiciales de sus padres. Irene es grande de España y recibirá el tratamiento oficial de excelencia cuando cumpla la mayoría de edad, aunque no tiene ningún título nobiliario, al igual que sus hermanos y sus primos.

Fue bautizada por Monseñor Rouco Varela en el Palacio de la Zarzuela y sus padrinos fueron Rosario Nadal, ex mujer de Kyril de Bulgaria, príncipe de Preslav, y Pedro López Quesada, casado con Cristina de Borbón-Dos Sicilias, todos ellos íntimos amigos de la infanta Cristina y de Urdangarín. Forman parte del escudo protector que sus íntimos desplegaron en torno a la pareja cuando estalló el caso Nóos.

Irene vivió con su familia en Barcelona, donde estudió en el Liceo Francés, como sus hermanos, hasta septiembre de 2014, cuando la familia se trasladó a Ginebra. Anteriormente pasó un año, 2009, en Washington con su familia. Hoy, en plena adolescencia, Irene ha dejado de ser la «niña» rubia y se ha convertido en una joven de rasgos armoniosos y elegantes.

Cuentan quienes la conocen que tiene una fuerte personalidad, algo que podría marcar ahora, si se confirma la infidelidad de Iñaki Urdangarín a la Infanta Cristina, la relación de la adolescente con su padre. Se sabe que viajaba sola con frecuencia a Madrid, para ver a su padre, que estaba entonces en la cárcel de Brieva, en Ávila, y que solía alojarse en La Zarzuela con su abuela, con la que al parecer está muy unida. Hoy viaja menos a Madrid, tras la libertad de su padre, afincado en Vitoria, pero sigue haciéndolo para encontrarse con amigas. Poca gente se da cuenta de estos viajes por la extrema discreción de Irene que, en lugar de salir, recibe a sus amigas en La Zarzuela. Es doña Sofía la que viaja más a Ginebra para ver a la familia.

Irene también guarda su vínculo con Barcelona, la ciudad en la que vivió ocho años. Este último mes de noviembre, aprovechando sus vacaciones escolares de mitad de trimestre, pasó una semana de vacaciones en la Ciudad Condal. Parece que suele viajar a la ciudad alrededor de una vez al mes. Tiene muchos amigos allí, incondicionales, y no está dispuesta a renunciar a ellos.

Viaja sola, pero también acompaña a menudo a su madre, especialmente cuando era directora del Área Internacional de la Fundación La Caixa, puesto que dejó en enero para dedicarse solo a la Fundación Aga Khan en Ginebra. Su hermano Pablo, que acaba de debutar en el primer equipo del Barça de balonmano, también está asentado en la ciudad. En noviembre, Irene acompañó a sus padres, que se habían desplazado con motivo del segundo partido de Pablo. Irene suele alojarse en casa de su tía Ana Urdangarín, hermana de su padre. Cuando se desplaza sola siempre lo hace acompañada de dos guardaespaldas que estarán con ella hasta que cumpla 18 años.

En sus últimas fotos hemos podido ver a una chica con estilo propio. Parece que le interesa mucho la moda y que es coqueta. Le encantan los abrigos «oversize», los pantalones anchos y los cuellos de cisne. También las sudaderas y los bolsos XL y la hemos visto con distintos tipos de bisutería, como unos pendientes dorados en forma de aro, a juego con un colgante. La unión entre las infantas Elena y Cristina ha hecho que Irene tenga una estrecha relación con su prima Victoria Federica de Marichalar. La relación, sin embargo, con sus primas Leonor –con la que se lleva cuatro meses– y Sofía es distante, aunque correcta. Las malas relaciones existentes entre don Felipe y doña Letizia con la infanta Cristina no han facilitado que las jóvenes se conozcan más.