Jesús Ortiz, padre de la reina Letizia, pide disculpas tras su rifirrafe en las redes sociales: «Me he dejado provocar»

Docente y madre de familia de 84 años con apenas una docena de seguidores. Este es el perfil en la red social X, antigua Twitter, de la persona que ha hecho perder los nervios al normalmente sosegado Jesús Ortiz, padre de la reina Letizia . El periodista mantuvo un toma y daca dialéctico con esta usuaria que rápidamente se hizo viral y que ahora el periodista ha querido zanjar pidiendo disculpas... a su manera.

Todo comenzó cuando esta persona recuperó un post de Ortiz de 2021 en el que se declaraba «oficialmente jubilado» para poner en duda su vida laboral. «En la partida de su hija Letizia, figura usted como estudiante. En la partida de nacimiento de su hija Telma, figura como vendedor. No salen CINCUENTA años de vida laboral, ¿y cuándo se hizo usted periodista?», le interrogaba tres años después.

En vez de dejar pasar el tema, Ortiz decidía defenderse lanzando explicaciones como que «a finales de los 60 no había carrera de periodismo» o «tengo más años de trabajo (y experiencia) que cotizados», además de sugerir a su interlocutora que aprendiera a restar.

No fueron pocos sus seguidores que le recomendaron que no entrara al trapo. «Jesús, ¿hay necesidad de dar explicaciones?», le decía uno de ellos. «Es que no creo que haya mala intención; solo cortedad de miras. Una pena», era la respuesta del airado abuelo de Leonor y Sofía .

Un tanto superado quizá por la situación, el hijo de la fallecida locutora Menchu Álvarez del Valle también se dedicó a rebatir a otro puñado de usuarios que le tildaban de «mentiroso», «mediocre» o incluso de «laista».

Finalmente, dos días después de que comenzaran las hostilidades y con los ánimos más calmados, el padre de la reina Letizia decidía enterrar el hacha de guerra en la misma red social.

«Bueno, vale: mea culpa. Me he dejado provocar por seres que no quiero calificar, que ya se califican solos. Me recluyo en el 'ladran, luego cabalgamos'. Que sean felices», era su explicación haciendo uso de una frase que se ha hecho muy popular en las redes estos años y que hace referencia a seguir adelante a pesar de las críticas, y que por error, se atribuye a 'El Quijote'.

Decidido a que no le vuelva a ocurrir lo mismo en el futuro, no le vaya a caer algún reproche desde la Zarzuela, el protagonista de esta historia compartía otra frase de uno de sus seguidores, que consideraba apropiada a las circunstancias: «Si aparece alguien solo para provocarte, limpia el polvo de tus zapatos y sigue adelante». Unas palabras que escribía Paulo Coelho en 'El manuscrito encontrado en Accra'. «Este me lo apunto», era el comentario de Jesús Ortiz junto a un emoji sonriente.

A sus 74 años y «jubilado de mi relación laboral, pero no de mi profesión», como indica en su biografía de la red social de la discordia, Jesus Ortiz lleva una vida discreta y tranquila en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, en la casa que compró con su segunda mujer, Ana Togores , con quien contrajo matrimonio en 2004, poco antes de que lo hicieran el príncipe de Asturias y su hija.

Con un perfil siempre bajo de cara a los medios, muy recordada es su entrevista, vía telefónica con los periodistas de 'Salsa Rosa', del momento en que se conoció el noviazgo entre los actuales reyes de España . «Si me preguntáis por una definición de Letizia os digo que es la persona más cariñosa, entregada, perfeccionista y deliciosa que yo conozco», dijo entonces con orgullo de padre. «A mi hija le encanta la cultura, la literatura, es una lectora empedernida», añadió sobre ella entonces.

Tras estas palabras, hubo que esperar dos décadas para que volviera a conversar con un medio. Fue hace apenas unas semanas con el 'Faro de Vigo' y en la entrevista no hubo mención a los Borbones. «Rehusó amablemente responder a otro tipo de cuestiones», dejaba entrever al respecto el autor del artículo.

Sí tuvo tiempo Jesús Ortiz de tener un cariñoso recuerdo para su madre, de declararse lector empedernido y viajero acérrimo y de descartar escribir sus memorias, porque «no serviría más que para alimentar morbos innecesarios». Ah, y también de asegurar que tiene el bloqueo fácil cuando alguien le importuna en las redes, algo que le vendrá bien recordar para evitar futuras controversias.