La reina Sofía con su lazo de diamantes en la boda de Teodora de Grecia. /
Como esperábamos, la boda de la princesa Teodora de Grecia y el abogado Matthew Kumar se convirtió en un auténtico duelo de estilo entre algunas de las royals más elegantes del viejo continente. No solo el look de la novia y los vestidos de gala de las invitadas compitieron en elegancia, sino que las joyas brillaron especialmente en la gran fiesta en Atenas de la que fue anfitriona la familia real griega.
Ya en el evento preboda celebrado en el Museo Bizantino y Cristiano de Atenas, pudimos ver a la reina Ana María, madre de la novia , con unos pendientes de perlas y collares de varias vueltas, uno de ellos con una cruz de diamantes. Diamantes y perlas elegía también la princesa Teodora para este aperitivo de su gran día, antes de mostrarnos en su 'sí, quiero', el auténtico plato fuerte: la famosa tiara de Jedive .
La princesa Teodora de Grecia y Dinamarca llegaba a la catedral de Atenas del brazo de su hermano, el príncipe heredero Pablo con un vestido de novia confeccionado por la diseñadora Celia Kritharioti, mientras se convertía en la séptima novia real en llevar la tiara del Jedive de Egipto, que data de 1905. También llevó el antiguo velo de encaje irlandés que perteneció a su bisabuela, la princesa Margarita de Connaught.
Teodora con su tiara, del brazo de su hermano Pablo. /
Teodora también lució otras tres interesantes piezas de joyería con su conjunto nupcial. Sus pendientes son los mismos que llevó su hermana, la princesa Alexia, en su boda de 1999. En la muñeca derecha, llevaba parte del sautoir de diamantes que perteneció a su bisabuela danesa, la reina Alejandrina, y en la izquierda, el brazalete de oro que tradicionalmente llevan todas las descendientes femeninas de la reina Ingrid.
La orgullosa madre de la novia acudió a la ceremonia elegantemente vestida de azul claro, que acompañó de un collar de perlas con la cruz de diamantes que lució el día de su propia boda , celebrada en septiembre de 1964, justo seis décadas antes de la de su hija.
La reina Ana María de Grecia. /
Ha llevado la misma cruz en varias bodas familiares , incluidas las del príncipe Pablo en 1995, el príncipe Nicolás en 2010 y el príncipe Philippos en 2021. También la lució en el funeral del rey Constantino en 2022.
Marie-Chantal Miller con sus hijos en la boda. /
La princesa heredera Marie-Chantal Miller llegó a la catedral de Atenas junto a sus cuatro hijos, compitiendo en elegancia con la princesa Olympia . Llevaba unos discretos pendientes de aro de oro y pulseras en ambas muñecas que combinaban con su vestido color melocotón. Tanto Olympia como Arrietta Morales y de Grecia, la hija mayor de la princesa Alexia, lucieron sutiles joyas con sus vestidos de dama de honor.
Nina Flohr junto a su marido y su padre en Atenas. /
La princesa Alexia, que llegó junto a su marido y tres de sus hijos, lució un collar de diamantes con una característica forma de V. Una de sus hijas, Ana María, lució el mismo vestido brillante que Alexia llevó para su propia cena preboda en julio de 1999. La princesa Nina, que llegó con su marido, el príncipe Philippos, y su padre, Thomas Flohr, causó sensación también con un collar de flecos con perlas.
El pequeño cónclave Borbón en Atenas no estuvo tampoco exento de brillo. La reina Sofía nos sorprendía posando muy sonriente con un atrevido diseño de color fucsia . En cuanto a las joyas, destacaba especialmente un lazo en platino con diamantes desgastados que ya la vimos lucir en 1975, con motivo de la proclamación del rey Juan Carlos I. Esa pieza tan especial también la ha compartido con su nuera, la reina Letizia, que la usó en la coronación de Carlos III en Londres.
La delegación española en Grecia. /
Sus hijas, las infantas Cristina y Elena, optaban por vestidos en azul royal en homenaje a la familia real griega, destacando especialmente las joyas elegidas por esta última. La madre de Victoria Federica y Froilán apostó por un llamativo choker XL formado por perlas y diamantes.
Irene Urdangarin, con un look muy alabado , capturó muchas miradas apostando por un vestido de alta costura en azul añil, que completó con un bolso de mano en color plata y unos pendientes de diamantes. Su madre optó por unos pendientes de rubíes y diamantes que ya lució en otra boda royal, la de Federico y Mary de Dinamarca en 2004.