Los contrastes en la agenda de la reina Letizia son habituales, más en un año en el que los reyes han tenido que acudir al funeral de Estado más importante del siglo, el de la reina Isabel II, o ejercer de anfitriones en una cumbre histórica de Naciones Unidas que reunió a una cantidad de presidentes y primeros ministros nunca vista. En estos días, Letizia vuelve a enfrentarse a un nuevo salto mortal diplomático: pasa de entregar unos premios en el pequeño pueblo de Macael, en Almería, a preparar su primer viaje oficial a Croacia.
La locura que este salto geográfico significa es evidente: en menos de una semana, la reina Letizia debe documentarse para entender la relevancia de su visita al pequeño pueblo de Macael y, paralelamente, interiorizar la función de Estado que lleva a los reyes a un país tan complicado como Croacia, aún con muchas tensiones con Bosnia Herzegovina y que el año que viene adopta el euro como moneda oficial. Entre otras cosas, se abre así un nuevo mercado exportador para las empresas españolas.
Es precisamente este aspecto empresarial el que acerca a estas citas de su agenda oficial aparentemente alejadas: en ambos casos, los reyes abren camino, empujan, subrayan y apoyan la actividad emprendedora española, sobre todo de cara al mercado internacional. A lo largo del año, Letizia y el rey Felipe son padrinos de los empresarios e industriales que exportan en innumerables ocasiones. Su labor es diplomática y ejercen de embajadores, pero el fondo de su actividad es muchas veces comercial.
Un buen ejemplo de esta labor invisible tiene que ver con el pequeño pueblo de Macael, punta de lanza del sector de la piedra natura en España que ahora trata de recuperar su relevancia internacional. Con el reputado mármol de Macael a la vanguardia, la Junta de Andalucía ha convertido a esta industria en objetivo de proyección exportadora y la reina Letizia y el rey Felipe subrayan la importancia de este extremo.
El apoyo de Letizia al sector del mármol almeriense, de Macael para más señas, tiene un largo aliento. De hecho, la reina presentó la gala de entrega de los Premios Macael hace 20 años, en 2002, aún como presentadora de Televisión Española. Justo un año después, en 2003, Casa Real oficializaba el compromiso entre los entonces novios Felipe y Letizia. Reconforta comprobar que no hay pueblo pequeño para los reyes, sobre todo si en ellos se desarrolla una industria tan relevante.
Recordemos que, hace ahora un año, el rey Felipe ya visitó Almería para entregar el premio Reino de España a Francisco Martínez-Cosentino, el empresario que está a la vanguardia del sector de la piedra natural andaluza. El Grupo Cosentino emplea a más de 5.400 personas en todo el mundo y acaba de inaugurar la mayor planta de autoabastecimiento fotovoltaico de España.
Solo cinco días después de la gala de entrega de los Premios Macael, el rey Felipe y la reina Letizia se embarcarán en su primer viaje oficial a Croacia, otro destino clave a todos los niveles.No es un país extraño para los monarcas, que en verano de 2016 pasaron allí parte de sus vacaciones privadas, embarcados en el velero Dolce Vita para navegar junto a sus hijas a lo largo de la maravillosa costa dálmata.
No será un viaje largo: los reyes estarán solo dos días, 16 y 17 de noviembre, en Croacia, pero sí habrá tiempo para una recepción oficial en la que volveremos a comprobar el poderío seductor de Letizia en su despliegue del 'charme' royal. Es un activo importante de la Corona, que abre aquí paso para las empresas españolas que pretendan aprovechar la apertura del mercado croata al euro, el 1 de enero de 2023.
Los anfitriones de los reyes serán el presidente croata, Zoran Milanovic, y su esposa, Sanja Musić Milanović, a los que ya conocieron durante la cumbre de la OTAN de Madrid. Seguramente, Letizia conectará especialmente bien con la primera dama, científica croata licenciada en Medicina y profesora en la Universidad de Zagreb. De hecho, este viaje oficial a Croacia tiene una importante significación científica, además de empresarial.
La primera visita de Felipe y Letizia a Croacia celebra al firma de un gran acuerdo internacional para construir un acelerador de partículas en Granada, en la localidad de Escúzar. El gobierno croata se ha comprometido a financiar el 5% del centro que albergará esta infraestructura, el IFMIF Drones, un proyecto que forma parte de la gran iniciativa internacional que pretende dar a luz un nuevo modelo de energía, basada en la fusión nuclear.
Este viaje de los reyes a Croacia propicia un programa de trabajo que mira a largo plazo: pretende abrir una colaboración en el ámbito científico e industrial que pueda prolongarse a lo largo de décadas. Es en este contexto en el que interesa entender el despliegue de glamour y encanto del rey Felipe y la reina Letizia, mucho más que la guinda que culmina un esfuerzo de país global. Si hubiera resistencias, recelos o dudas, ellos tienen en su mano atenuarlas desde arriba. Incluso, disolverlas.