Mary de Dinamarca, plantada y sin novio: su viaje en solitario y por sorpresa que hace saltar las alarmas

Todo eran sonrisas y gestos cómplices en la última aparición conjunta de los reyes Federico y Mary de Dinamarca con motivo de su viaje de Estado a Alemania. Sin embargo, unas fotos captadas por los paparazzi vuelven a hacer circular las especulaciones sobre la buena salud del matrimonio royal . La razón es obvia: el monarca parece haberse quedado solo en casa, mientras que su esposa Mary ha viajado a más de 16.000 kilómetros de distancia sin previo aviso. La australiana ha sido vista en Sídney acompañada tan solo de su hija Josephine.

Ha sido el diario británico 'Daily Mail' el que ha publicado estas sorprendentes imágenes en las que vemos a la esposa del rey Federico de Dinamarca en la playa de Bronte, cercana a la más famosa Bondi Beach. Hay que fijarse bien para reconocer a Mary, ya que tratando de ser lo más discreta posible luce ropa deportiva. Pantalones cortos negros, zapatillas y un top forman un vestuario muy alejado de los looks que suele usar en sus eventos oficiales. Con las obligatorias gafas de sol culminaba la royal un perfecto outfit de incógnito, que no le ha servido para burlar en esta ocasión a los avispados fotógrafos.

La pregunta que surge al ver estas fotografías es evidente: ¿dónde está Federico? Según la agenda que figura en la web de la familia real danesa, el soberano tiene otras prioridades. Mientras su esposa se relaja en Australia, él organiza su tradicional cacería real en Gludsted Plantage el 31 de octubre. Pero Mary también debería estar de vuelta en casa el domingo 3 de noviembre a más tardar, ya que es el día en que se entrega la condecoración de honor en la Hubertus Hunt, un famoso evento anual que tiene cada año en el Parque de los Ciervos de Copenhague.

Mientras en la vecina Suecia todos los ojos miraban a la princesa Magdalena , regente por unos días después de que su familia al completo se fuera de vacaciones a Brasil, resulta que en Dinamarca estaba ocurriendo otro tanto con la escapada no anunciada de la reina Mary. La nativa de Tasmania se mostró relajada y sonriente paseando por la playa en compañía de una amiga mientras se recogía el pelo en una coleta.

Escondiendo su rostro tras unas gafas de sol y una gorra, también pudimos ver a la reina muy cariñosa con su hija, a la que aparece abrazando en varias de las imágenes publicadas por el diario británico. Mary visitó Australia por última vez en diciembre del año pasado junto a sus hijos menores, los gemelos Vincent y Josephine, ambos de 13 años, para pasar las Navidades con su familia. Aunque se trató de un viaje personal, en el que la reina mantuvo un perfil bajo sin la presencia de su marido, la monarca había tenido un compromiso real oficial en su país de origen unos meses antes.

A finales de abril de 2023 visitó Sídney durante un día para participar en un acto con representantes de empresas danesas implicadas en la transición ecológica en Australia, así como conocer en primera persona una serie de proyectos daneses relacionados con la construcción y el transporte sostenibles.

Este nuevo viaje de la reina Mary a Australia se produce prácticamente un año después de que su matrimonio con el rey Federico se viera plagado de rumores de crisis. La razón fue que el entonces todavía príncipe heredero apareció en la portada de una revista española paseando por Madrid con la socialité mexicana Genoveva Casanova .

El hecho de que la exmujer de Cayetano Martínez de Irujo negara enérgicamente cualquier tipo de relación sentimental entre ambos, no evitó que la noticia se extendiera a medios de todo el mundo, mientras la casa real danesa guardaba silencio al respecto. Por su parte, la relación entre Federico y Mary mostraba un lenguaje corporal glacial en sus apariciones públicas a partir de ese momento.

Con el paso de los meses y la proclamación de Federico como rey en sustitución de su madre, la reina Margarita, ambos han tratado de mostrar solidez en su relación , algo que no siempre han logrado. En medio de las críticas a la escasa agenda de la australiana, a la falta de transparencia de ambos, atrincherados tras los muros de su castillo en pleno siglo XXI, e incluso a sus excesivos días de vacaciones, los rumores de vacaciones por separado no ayudan a consolidar su imagen de matrimonio feliz al cien por cien.