Como toda dinastía que finaliza, tras la revolución de Jomeini, la familia real Pahlavi acabó dispersa por el mundo. Mientras que el primer gran amor del Sha, la bellísima Soraya , acabo repudida, la última emperatriz de Persia, Farah Diba , vive el exilio en París desde hace años. Su nieta y primogénita del heredero del derrocado trono, Noor de Irán, acaba de reencontrarse con ella en Estados Unidos tras más de dos años sin verse.
La princesa Noor fue el primer miembro de la estirpe que nació fuera de su país de origen. Ella lo hizo en Washington D.C, fruto del matrimonio entre Reza Pahlavi, príncipe heredero de Irán y Yasmine Etemad-Amini, quien recientemente ha superado un cáncer de pecho. La joven pronto destacó en la industria de la moda, desfilando para pequeñas firmas y posando en portadas de revistas internacionales. Aunque atesora más de 360 mil seguidores en su cuenta de Instagram, se dedica al mundo de los negocios de forma exitosa y no parece arrastrar la alargada sombra que persigue a su familia desde el exilio.
En 1979, la familia tuvo que huir del país a causa de la revolución de Jomeini, haciendo que Farah Diba y su marido, el sah Mohammad Reza Pahlavi, viajaran de país en país hasta 1980, cuando el mandatario falleció a causa del cáncer. Finalmente, Farah Diba terminó residiendo en París, después de sufrir el suicidio de dos de sus hijos en 2001 y 2011, Lela y Ali, respectivamente. Actualmente viaja temporalmente hasta Connecticut, para visitar a sus nietas, Noor, Iman y Farah, hijas de su primogénito.
Este fin de semana, se ha dado uno de esos viajes temporales de la antigua emperatriz, y abuela y nieta se han podido reencontrar. El momento ha sido más que emotivo y ha quedado reflejado en redes sociales, gracias a que la joven ha decidido hacer gala de la buena relación que mantienen a través de su cuenta de Instagram.
20 de enero-18 de febrero
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