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Un planazo para disfrutar sin salir de casa: cata de cerveza y maridaje
Apunta estos tips para aprender a catar una cerveza y maridarla y sorprender a tus amigas, pareja o familia
María CáceresReconozcámoslo. Hay días en los que la realidad pandémica se nos hace cuesta arriba, en otros amamos poder estar casa relajados con un buen libro y también los hay en los que la monotonía nos puede. Ansiamos esas reuniones rodeados de amigos, familias o en pareja, pero la buena noticia que ahora es el momento para practicar ciertas artes con las que celebrar la "normalidad" cuando esta se instale definitivamente en nuestras vidas.
Si este último año te has convertido en la reina del pan y la paella (y en tu casa dan fe de ello), si ya eres una yogui avanzada que está deseando compartir sus conocimientos o si estás deseando que tus amigas vean in situ cómo has restaurado ese mueble del salón, también puedes aprovechar para este tiempo en casa para convertirte en una maestra cervecera. No solo hablamos de beberla, que también, sino en ser una experta en catarla y maridarla. ¿Se te ocurre un mejor plan para sorprender a tus invitados cuando puedan pasar las puertas de tu casa?
Lo primero que tienes que hacer es elegir bien la cerveza. Cada día hay más variedades, marcas y diferencias, pero ¿cómo decantarse por una? Si lo que buscas es sorprender, lo mejor es una cerveza que tenga personalidad y carácter. Que posea algo que la haga especial y que sea diferente. Que haga de ese primer trago toda una experiencia para recordar el momento. El Águila Sin Filtrar y El Águila 1900 cumplen todos estos requisitos. Es una cerveza auténtica, desenfadada, atrevida, independiente y con tanta personalidad como tú. ¿Preparada?
El Águila Sin Filtrar es una cerveza inspirada en los métodos tradicionales de elaboración de principios del siglo XX, en los que no se filtraban las cervezas y se mantenía toda la levadura tal y como está en el tanque de fermentación. Porque al fin y al cabo, un sabor genuino no necesita filtros ni distracciones. Ligeramente turbia y con un aroma y un frescor tan disruptivo como tradicional, es además una cerveza muy especial con la que no dejarás a nadie indiferente ya que, para disfrutarla en todo su esplendor, es necesario darle la vuelta a la botella antes de servirla, sin agitarla. Un ritual perfecto para una velada en compañía y tan personal como su sabor.
Por su parte, El Águila 1900 está pensada para aquellos que buscan esa misma cerveza, pero filtrada. Una lager especial, muy equilibrada y fácil de beber, con un sabor característico que combina la intensidad de la malta caramelizada junto con la frescura de su mezcla de lúpulos. Una cerveza de color dorado brillante y espuma blanca consistente, gracias a su perfecta combinación de maltas.
Y ahora que conoces un poco más de estas dos cervezas tan pioneras como inconformistas (las fundó hace más de un siglo un artista bohemio español que dio un golpe de efecto cuando el vino era el rey de la mesa y la barra) con las que vas a conquistarte y conquistar a los demás, apunta estos tips para convertirte en una especialista catadora de cerveza.
Un cata de cerveza en cinco sencillos pasos
Paso 1: Toda cata tiene su ritual y en el caso de El Águila Sin Filtrar es todavía más personal. Lo primero que tienes que hacer antes de abrirla es darle la vuelta a la botella (sin agitar). Girarla completamente. Esto despertará todos sus aromas y sabor y sus matices más sutiles.
Paso 2. Agudiza la vista. Es el primer sentido al que debes aferrarte al que iniciar una cata... al fin y al cabo, ¡todo entra por los ojos! Examina cuidadosamente tu vaso de El Águila Sin Filtrar o El Águila 1900. Fíjate en el color, la espuma que se forma... Lo sentimos, pero aún debes resistir un poco más antes de probarla.
Paso 3. ¿A qué huele? Aromas frutales, cítricos, caramelo... Es el momento de notar en toda su intensidad los aromas de la cerveza. Para ello, huele un par de veces rápidamente, para después hacer una aspiración normal. Toma una última inhalación con la boca abierta y experimenta.
Paso 4. Probemos en boca. Ve practicando porque te encantará decir a tus invitados esta frase. Sí, ha llegado el momento del gusto. Saborea la cerveza en pequeños sorbos dejando que permanezca en tu boca y los sabores se asienten, así podrás experimentar todas sus particularidades.
Un último consejo. Para que la cata sea redonda es importante hacerla en una habitación bien iluminada y ventilada (la hora del aperitivo es perfecta) y sobre una mesa con fondo o mantel blanco para poder apreciar todas sus tonalidades. ¿Qué más necesitas? Además del vaso de la cata, otro con agua mineral y unas galletitas saladas para recuperar los sentidos tras cada paso.
¿Y cómo marido la cerveza?
Maridajes hay tantos como colores y gustos personales, desde los más convencionales para el aperitivo hasta los más sorprendentes y sibaritas perfectos para una comida o una cena. Pero como estamos pensando en practicar para deslumbrar a nuestros invitados (cuando podamos tenerlos en casa), apunta estas ideas. Cuando sirvas El Águila 1900 durante el aperitivo, acompáñala de minibocatines de calamares, patatas bravas o ensaladas individuales. Si buscas un plato más atractivo para llevarla a la mesa, toma nota: tartar de salmón, sushi de salmón o atún y comida mexicana con un nivel picante intermedio como las quesadillas o los tacos.
La ensaladilla rusa, las croquetas de bacalao o jamón y el hummus maridan a la perfección con una cerveza tan auténtica como El Águila Sin Filtrar. Pero te aseguramos que dejarás a todos boquiabiertos si plantas un buen cocido en la mesa y esta cerveza en la copa. Otras ideas infalibles son el ceviche, los platos con setas y, sobre todo, esas recetas muy picantes de la cocina india y mexicana. Eso sí, un último consejo, asegúrate que el picante realza los sabores y no los mata. ¡Y a disfrutar!
El Águila recomienda el consumo responsable