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COMER BIEN

Las ventajas de la dieta cromática o por qué deberías incluir muchos colores en tu alimentación

La alimentación, lo mejor siempre es la variedad. Y no solo de ingredientes, sino de colores. ¿Sabías que cada pigmento de color de los ingredientes tiene unas propiedades u otras? Se trata de la dieta cromática, que te ayudará a cubrir todos los nutrientes de una forma sencilla y, al combinar distintos colores en un plato, conseguirás que sea más atractivo, sabroso y saludable.

Àngela Zorrilla

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Ángela Zorrilla

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Un plato rico en colores es un plato rico en nutrientes. Consumir alimentos variados a diario te ayudará a sentirte bien físicamente y emocionalmente y, cómo no, en esa variedad debes incluir, a partir de hoy, los colores. Visualmente un plato colorido será más “apetecible, atractivo y sabroso e incentivará el sentido del olfato, el gusto y la vista”, explica Inés Pérez, especialista en Nutrición y Dietética y miembro de la plataforma Top Doctors.

Pero ¿qué otros beneficios tiene una dieta cromática? Pérez asegura que “cuantos más colores tenga, más nutrientes aportará ese menú”. Hablamos de macronutrientes como las grasas y las proteínas; micronutrientes como los minerales y las vitaminas; pero también de los fotoquímicos. Y “no pueden faltar todos ellos en cada plato”, apunta. Eso sí, debe hacerse con sentido común y evitando que tu plato acabe pareciéndose más a un arcoíris que a una receta equilibrada y sana.

El color, explica la especialista en Nutrición, lo proporcionan, sobre todo, los vegetales, que “deben estar presentes siempre en gran proporción, ya sea como plato principal o acompañamiento”. Ensaladas, cremas, verduras al horno, al vapor o salteadas. Con un poco de imaginación, verás las mil y una posibilidades que tienen estos ingredientes.

Consumir alimentos variados a diario te ayudará a sentirte bien físicamente y emocionalmente.

Y, por otro lado, también viene dado por la fruta: otra gran explosión de color que vas a necesitar incorporar a tu dieta sí o sí cada día. Inés Pérez aconseja tomar la fruta como postre o bien en una ensalada o batido, o “incluso en algunos casos antes de una comida”. Y ¿de dónde salen las diversas tonalidades? De pigmentos naturales. Así de sencillo.

Los colores y sus nutrientes

El libro 'What color is your Diet?', de David Herber, o 'The Colour Code', todo unos best-sellers en esta materia, explican que no todas las frutas o verduras son iguales. Es decir, no todas te van a aportar los mismos nutrientes. Por eso es importante prestar atención a los colores que predominan en tus platos y aprender qué nutrientes te va a proporcionar cada alimento según su gama cromática.

Un plato rico en colores es un plato rico en nutrientes

Así, los alimentos amarillos, rojos y anaranjados son ricos en caroteno y precursores de la vitamina A, que “actúan como antioxidantes frente a los radicales libres”, añade la nutricionista. Además, este colorido grupo refuerza el sistema inmunológico. Ya sabes, apuesta por la papaya, el tomate, la zanahoria, las fresas o los mangos para mantener tu piel saludable y conservar una buena vista. Y “son depurativos”, por lo que te ayudarán a eliminar las toxinas de tu cuerpo.

 "Cuantos más colores tenga, más nutrientes aportará ese menú"

Inés Pérez, especialista en Nutrición y Dietética

Por otro lado, los alimentos con pigmentos azules y púrpuras como las uvas, las cerezas, los frutos rojos o la remolacha contribuyen a que “el sistema circulatorio funcione mejor y protegen también el sistema urinario”.

Finalmente, los alimentos verdes se caracterizan porque contienen clorofila y, gracias a su fibra, “evitan el estreñimiento”. Son una gran protección cardiovascular, ya que mejoran, además, “la circulación de la sangre y previenen el colesterol”, cuenta. Y, los ingredientes blancos son tu mejor aliado para aumentar las defensas. Estos alimentos –como el ajo, las cebollas o el nabo- contienen flavonoides y te ayudan a reforzar el sistema inmunitario, “aumentando la resistencia ante posibles agresiones de virus y bacterias”.

Lo ideal sería incluir tantos colores como sea posible, pero en realidad lo que debe preocuparte es que, cada semana, tu menú incluya alimentos de todos los grupos. Es decir, un plato único no tiene porqué cubrir todos los colores. Fíjate en qué comes durante la semana.

La doctora Pérez propone, por ejemplo, un menú sano y colorido, que además es altamente saludable por su combinación de colores: prepara una crema de guisantes con sésamo tostado y virutas de jamón y, de segundo, un salmón al papillote con cherrys, brócoli, cebolla y boniato. Para finalizar, nunca falla la piña natural o la manzana al horno con canela.

Explosión de color

Añadir color a tus platos es mucho más que una tendencia. Es una gran herramienta para elaborar menús revitalizantes, antioxidantes y con numerosos beneficios para tu salud. ALDI apuesta por priorizar el consumo de frutas y verduras de temporada que te ayuden a seguir una ideal dieta saludable llena de colores.

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Este contenido ha sido desarrollado por Content Factory, la unidad de contenidos de marca de Vocento, con ALDI. En su elaboración no ha intervenido la redacción de este medio.