Las nuevas princesas conducen SEAT
Sin sistema de navegación, conexión a Internet ni tecnologías actuales, habrá quien piense que los coches clásicos son auténticas “carrozas”. De acuerdo con esa definición estos son los vehículos perfectos para el Rallye des Princesses.
Los que no conocen el Rally de las Princesas pensarán que está competición de alto nivel, al volante de vehículos clásicos y exclusivamente para mujeres, es un “paseíto” de adineradas poseedoras de coches de colección. Y en algunos casos no les falta razón, pero la mayoría de las participantes son verdaderas apasionadas de los coches clásicos y de la competición, además de verdaderas expertas en los rallys de regularidad, una disciplina del automovilismo deportivo poco conocida y realmente complicada, sobre todo para la copiloto.
El Rally de las Princesas nació para recuperar el espíritu del Paris-Saint-Raphaël, la primera prueba automovilística exclusivamente para mujeres que empezó a disputarse en 1929. Una competición para auténticas pioneras y seguro que por aquel entonces princesas y aristócratas “de verdad”. Lo curioso es que ahora, casi un siglo después, el Rallye des Princesses sigue despertando el mismo interés que aquella prueba y por la misma razón, estar reservada solo a mujeres.
En las 21 ediciones celebradas hasta la fecha del Rally de las Princesas, no había participado un equipo oficial de una marca con sus coches clásicos… hasta este mismo año en que lo ha hecho SEAT. La marca española incribió dos coches de su colección histórica y los llevó hasta el parque cerrado, situado en la emblemática Place Vendôme de París, lugar desde el que también se daba la salida a este espectacular rally que no tiene parangón con ninguna otra prueba del calendario deportivo internacional del automóvil. Dos SEAT clásicos en manos de cuatro mujeres de caracteres y nacionalidades muy diferentes pero auténticas apasionadas del automóvil y con un espíritu competitivo hiperdesarrollado. Coches clásicos de muy alto nivel (y algunos de muchos cientos de miles de euros), moda, glamour y un recorrido por parajes espectaculares de la costa de Normandía, hacen de este rally algo diferente y muy especial.
Los 85 equipos inscritos en el Rally de las Princesas recorrieron más de 1.200 kilómetros a lo largo de cinco días, desde París hasta La Boule, en la región de Normandía. Numerosos tramos de regularidad en los que cumplir los estrictos tiempos que marca la organización y una prueba en el circuito de Lohéac, pusieron el contrapunto de verdadera competición al glamour que envuelve a este rally sin igual. Ciudades tan conocidas como Le Touquet o Deaville, donde se celebra el festival de cine americano, o el emblemático Mont Saint-Michel fueron los espectaculares escenarios por los que las princesas compitieron con sus vehículos clásicos.
Bajas por averías mecánicas, un conato de incendio durante un repostaje e incluso algún pequeño accidente hicieron que solo llegaran a la meta de La Baule 76 equipos, entre los que se encontraban los dos SEAT, que no sufrieron ningún incidente en los cinco días de la competición. Renata e Ingrid llevaron el 124 Sport al puesto 16º de la general y vencieron en su categoría, mientras que Telva y Clémence alcanzaron la posición 33ª, dos logros excelentes para su primera participación frente a otras “princesas” con mucha más experiencia en esta competición.
Las princesas de SEAT
El equipo SEAT estaba compuesto por dos coches de su colección de históricos, un 124 Sport 1600 de 1971 conducido por la modelo y presentadora de televisión Renata Zanchi, acompañada por la experimentada copiloto belga Ingrid Peters, y un 1200 Sport “Bocanegra” de 1976 en el que la periodista española del motor Telva Somoza y la también periodista y presentadora de la televisión francesa Clémence de Bernis, se alternaban en las tareas de piloto y copiloto. La coordinación logística del equipo SEAT de las Princesas corrió a cargo de Isidre López, responsable de vehículos históricos de SEAT. En la foto, de izquierda a derecha, Telva, Ingrid, Renata y Clémence.