Entrevista
Entrevista
Simorra siempre ha estado en el centro de la elegancia y el saber hacer la moda española. Desde su debut hace justo un año en la Mercedes Benz Fashion Week Madrid no ha parado de conquistar miradas y corazones con sus creaciones. Las claves de su éxito: un diseño cuidado, una historia detrás de cada prenda y una atención exquisita al detalle en cada tejido.
Esta 80º edición de la Semana de la Moda madrileña nos ha regalado The Space Between, la colección de la casa dedicada a la próxima primavera, cargada de significado. Su nombre, 'el espacio entre', hace referencia al MA, un término japonés que, según nos cuentan Eva Dimas, directora de marca, y Victoria Mitjans, directora de diseño representa: «pausa, intervalo, espacio, respiro».
Y Continúan: « En Japón,el MA no lo entienden como simplemente un vacío, sino que lo es algo consciente. Está pensado para poner en valor el resto de la obra. Si piensas en el típico arte japonés, que es todo blanco y negro,te das cuenta de que el blanco está pensado para poner en valor el resto. Lo que hemos hecho ha sido adaptar este concepto a nuestros tejidos».
En la casa Simorra, el gran valor de su obra son los tejidos, que son el hilo conductor, nunca mejor dicho, de cada idea, cada obra y cada pensamiento que la casa transmite con sus creaciones. «El tejido es un lienzo en blanco con el que empezamos a crear todo», confiesa Eva Dimas.
El vestido que abría el desfile, como muchos otros de la colección, lleva una gasa blanca por encima que deja entrever el vestido que hay debajo, todo troquelado con motivos artesanos bien cuidados. «Con el movimiento, se genera un vacío entre las dos telas que es muy interesante. Se sugiere lo que hay debajo, pero no se ve directamente», añade Victoria Mitjans.
Otro de los conjuntos está confeccionado en un exquisito encaje tradicional, que actúa como lienzo sobre el que el equipo de diseño dibuja motivos con tiras de algodón, que a su vez dejan huecos en los que se aprecia la base. «Sin esos vacíos, no verías el dibujo», por eso argumentan que es tan importante tanto la presencia como la ausencia de vacíos y de ambas telas que se complementan a la perfección.
Otros tejidos conun trabajo increíble de geometrías unidas entre sí por tiras de hilo casi invisibles, vestidos con tiras de denim que dejan espacios libres, los plisados y los huecos que dejan entre cada pliegue o las siluetas tan especiales como los top péplum, que dejan un vacío entre una prenda y la de debajo, enlazan con el concepto del MA, para valorar la obra en todo su conjunto.
«El concepto viene por esa intranquilidad que sentimos como sociedad cuando hay un momento de pausa, de silencio. Nos ponemos nerviosos. Hacemos ruido en exceso y no nos damos cuenta de que necesitamos estos momentos de pausa para poder crear y conectar con nosotros mismos», explica el equipo de Simorra.
Con esta colección, la casa invita a todo el mundo a parar, a coger aire y a respirar para poder seguir. Cada detalle esta cuidado al milímetro para que todo tenga sentido con el concepto, incluidos los accesorios: los pendientes de cristal (un material que no suelen utilizar en joyería) huecos con detalles metálicos en medio son sencillamente espectaculares. No hay puntada sin hilo en esta colección.