Las nuevas reglas del maquillaje las dicta Carolina Herrera

Entramos en el verano y, con el cambio de estación, toca hacer cambio también en el neceser de maquillaje. Estos meses de calor exigen productos más ligeros y la mayoría apostamos por dejar un poco de lado la base de maquillaje y hacernos con unos buenos polvos de sol que nos aporten ese efecto bronceado.

Para las notas de color en las sombras, lo mejor es elegir tonos divertidos y arriesgados y eso se traduce en un naranja suave para los looks de día y algo más atrevido para la noche: con el amarillo, azul o verde no te equivocas. En exceso, no importa. Puedes colorear solo el párpado móvil o salirte por el lagrimal. Deja volar tu imaginación.

Los labios también son importantes y, aunque hasta ahora las reglas eran elegir solo un foco de atención, o maquillabas mucho los ojos o lo hacías con los labios, ahora se pueden maquillar ambas partes por igual. Es más, desde Herrera Beauty apuestan por su nueva colección Good Girl Maxi Glaze, unos labiales llenos de color y con mucho brillo que combinan a la perfección con las sombras más llamativas.

Para los looks de día, hay una combinación que nunca falla: los tonos tierra con naranja. El rostro con un maquillaje muy ligero, con pinceladas de polvos bronceadores o colorete en tono melocotón y sombras en marrón claro o color arcilla. Si son mate, mejor, para que hagan contraste con una boca jugosa que, en este caso ha sido con un labial de brillo ligeramente perfilado por fuera de la línea natural de los labios para dar sensación de volumen.

Otro look de maquillaje perfecto para el día es este, un rostro con colorete en tonos rosas que contrasta con el brillo absoluto de la sombra en amarillo brillante aplicada en el párpado móvil y, ligeramente, bajo la línea de las pestañas inferiores para enmarcar la mirada. En este caso, los labios se dejan desnudos para que la única protagonista sea la sombra.

Esta opción es una clara apuesta para la noche. Los párpados glossy que casan a la perfección con un labio muy años 90 en tono marrón, con acabado brillo pero en versión satinada. Un truco para que queden perfectos es repasarlos primero con un perflador en el mismo tono y luego rellenar con la barra de labios.

¿Otro look de noche? Doble o nada: ojos y labios. Los primeros, con una sombra de color pastel, ligeramente tornasolada que se aplica por absolutamente todo el párpado, desde la ceja hasta el lagrimal y difuminado en el parte exterior. Los labios no se quedan atrás, con un tono frambuesa, en este caso mate, que convierte a la boca en otro foco de atención.

En resumen, este verano, el juego de color entre labios y ojos es la tendencia. Busca tus tres productos básicos y juega con elllos. ¡Todo vale!